ENTREVISTA

"El chiste en Colombia es estar vivo"

Con 50 años de vida artística, Carlos 'el Gordo' Benjumea no pierde la chispa. Esta semana empieza a celebrar con su obra 'No me descubras, Cristóbal'.

15 de mayo de 2010

SEMANA: ¿Cómo recibe los 50 años de vida humorística?

Carlos Benjumea: Con una carcajada prolongada. Es la mejor manera de celebrar.

SEMANA: ¿Cómo lo llaman ahora, gordo o ex gordo Benjumea?

C.B.: Ninguna de las dos. Me dicen ‘gordo hijueputa’, aunque debo aclarar que esa palabra depende del acento que se le ponga, con cariño o con odio.

SEMANA: ¿Cómo piensa celebrar las bodas de oro de comediante?

C.B.: Vuelvo con la obra No me descubras, Cristóbal, que está incluida en la Temporada de Carcajadas del Teatro Nacional. Después, voy a continuar con los proyectos que tengo en mente y que me hacen sentir vivo. Tal vez realizar una película o regresar a los café-conciertos en el bar.

SEMANA: ¿Qué fue lo último que hizo?

C.B.: Hace un año presenté Diálogos prostáticos. Tengo una obra que se llama Dos perros de antología. Sigo en actividad. Solo así logro que el tiempo no le gane a la vida.

SEMANA: No se le volvió a ver muy a menudo en la televisión y el cine. ¿Qué pasó?

C.B.: Como actor, uno está sujeto a las personas que dirigen y producen. En el último que participé fue en Amor en custodia, de RCN.

SEMANA: ¿No siente que el olvido es ingratitud?

C.B.: No, no, no. Es lo más normal en la vida de un artista. Con los años, uno camina más lento, pero más firme.

SEMANA: ¿Por qué se han acabado los espacios de humor en la televisión?

C.B.: Porque son muy difíciles de hacer. En la comedia es muy importante el tiempo y la interpretación. El silencio y la palabras tienen mucho valor. Además, el intérprete tiene que ser agradable y eso no es fácil de lograr.

SEMANA: ¿Qué ha cambiado en el humor colombiano?

C.B.: El cambio es grande, sin embargo, yo creo en la regeneración. Hoy hay gente talentosa, inteligente, preparada y culta.

SEMANA. ¿Qué lo pone serio o de mal humor?

C.B.: La violencia contra los niños, contra la naturaleza, los animales. En general la violencia me pone de mal humor, pues genera en mí un dolor profundo.

SEMANA: ¿Qué pasó con la Casa del Gordo?

C.B.: Estamos en el proyecto de volverla a abrir. Apenas tengamos luz verde, todos estarán invitados.

SEMANA: ¿Cuál ha sido el mejor chiste en estos 50 años?

C.B.: Estar vivo. En este país vivir ya es un chiste.

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