ENTREVISTA

"La guerra no es una realidad virtual"

Marina Gallego, coordinadora de la ruta pacífica de las mujeres, explica el porqué de su oposición a la militarización del país.

6 de octubre de 2003

SEMANA:¿Ustedes no están un poco 'out' al manifestarse en contra de la mano dura exigida por las mayorías?

Marina Gallego: Pueda que lo in ahora sea cerrarles espacio a las salidas negociadas, sin embargo, en el futuro, ojalá más cercano que lejano, las mujeres y los hombres de todas las tendencias tendremos que sentarnos en una mesa para hallar un acuerdo con las palabras y no con los fusiles.

SEMANA: En teoría suena bien pero la realidad dice que la gente eligió a un líder para que solucionara el problema de manera rápida y con autoridad.

M.G.: Es cierto. El presidente Alvaro Uribe tiene un gran liderazgo y un sentido de autoridad innegable. Lo cual no quiere decir que eso sea la varita mágica para solucionar el conflicto armado.

SEMANA: ¿Usted no cree que el Presidente, en particular, y el Estado, en general, van ganando la guerra?

M.G.: La guerra no la va ganando nadie. La guerra la estamos perdiendo todos. Hasta ahora la guerra nos ha causado más dolor, un dolor profundo, porque la guerra no es una realidad virtual. La guerra no es la que se ve en la televisión con partes de victoria de los militares, centenares de capturados y abrazos al jefe del Estado.

SEMANA: Pero es innegable que el Estado ha avanzado.

M.G.: Nosotras hacemos otra lectura: es innegable que las Farc no han sido tocadas, están intactas, están en las selvas dispuestas a una pelea en la que habrá más víctimas si no buscamos una salida que pase por el diálogo.

SEMANA: Sin embargo el Presidente intenta el diálogo que es, por ejemplo, lo que está haciendo con los paramilitares.

M.G.: Claro, pero ese camino debe ser mejorado porque si no habrá más frustraciones. La ley de alternatividad penal, por ejemplo no sirve para la reconciliación, no porque los autores de estos crímenes no vayan a la cárcel sino porque se debería conocer la verdad de todos sus hechos. Así en parte se lograría avanzar en el perdón de las víctimas y el país conocería su historia para que no quedara sin memoria y con grandes dosis de impunidad.

SEMANA: Finalmente, ¿cuál es la propuesta del movimiento de mujeres contra la guerra?

M.G.: La de que escuchen nuestro punto de vista. Porque hasta ahora la mirada del conflicto es binaria en blanco y negro. Nosotras nos oponemos a la militarización del país aportando nuestras voces que pasan por el diálogo, queremos ser oídas para aportar a la reconciliación de nuestra sociedad.

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