“Sí, tengo una hija„

dijo el sacerdote José de Jesús Gómez, al reconocer que tiene una niña de 4 años, nacida dos meses antes de ordenarse como religioso. La confesión empieza a confirmar algunas de las denuncias de abusos que estaban ocurriendo en la Iglesia de Cali.

1 de septiembre de 2007