La ciudad, una materia que entró a las aulas

El centro de Bogotá tendrá una nueva cara por cuenta de la  intervención urbanística que están realizando varias universidades de esta zona de la capital. Lo mismo ocurre en Medellín, donde la Universidad de Antioquia (Udea) ha contribuido con obras en áreas de interés para el municipio.
La universidad integrada a la ciudad y la ciudad integrada a la universidad es el principio fundamental de esa política. Las instituciones quieren aminorar el impacto en los entornos en los que están y transformarlos para que den calidad a quienes viven o transitan por sus caminos, como han hecho algunas universidades en Nueva York, Londres y Madrid. A continuación, una muestra  de esta tendencia.

Los tres principios del Rosario

El rector de la Universidad del Rosario, José Manuel Restrepo, explica los tres principios de los cambios que la institución lleva a cabo en el centro. El primero es recuperar y fortalecer este espacio de la ciudad para que sea el centro de la educación superior de Bogotá, como ocurre en otras ciudades del mundo.  El segundo es lograr la conservación arquitectónica de símbolos nacionales, como lo es el claustro del Rosario. Y el tercero es mantener a la universidad en el centro de los acontecimientos de la ciudad. “Es el sitio de encuentro de quienes opinan distinto, que están en orillas diferentes”, dice. En ese sentido,  la Universidad del Rosario lleva a cabo refuerzos estructurales, realiza adecuaciones y ha adquirido inmuebles aledaños, mediante una inversión que asciende los 25.000 millones de pesos.

Los Andes tiene Fenicia

“No es un tema de expansión de la universidad, sino de desarrollo sostenible.  Incluye viviendas, comercio, hoteles y otros usos para consolidar una ciudad diversa alrededor del campus”. Así explica Maurix Suárez, gerente del campus de la Universidad de los Andes, el proyecto de renovación urbana Progresa Fenicia que estará terminado en diez años. Serán 25.000 metros de espacio público (en total cinco manzanas) que beneficiará a transeúntes y residentes. La universidad lidera este proyecto con recursos privados. Comenzó en 2007 y en octubre del año pasado el alcalde Gustavo Petro firmó el Decreto 420 que le dio vía libre. La inversión estimada es de  500.000 millones de pesos.

La Central sale a la calle

Esta institución se ha propuesto “sacar la universidad a la calle y ver cómo abre su puerta a la ciudad”, explica José Eslava, asesor del rector. Eso ha llevado a la Universidad Central a plantear cuatro líneas estratégicas: 1. Universidad a la calle, con la que se buscar solucionar los problemas de los barrios aleñados mediante la integración de diferentes disciplinas. 2. Universidad de puertas abiertas, que tiene como objetivo ofrecerle más espacio a Bogotá con sus cuatro teatros,  laboratorios, biblioteca y aulas. 3. Proyecto campus, un nuevo edificio en la sede del centro, que estará terminado en 2017 e incluirá un mejoramiento del entorno. 4. Clúster de universidades del centro, que tiene por objetivo realizar proyectos, especialmente en movilidad, en conjunto con las demás instituciones de la zona. Si se suman todos los centros de educación superior del sector, esta es la ciudad universitaria más grande de América Latina.

La Udea sin barreras

Desde hace más o menos 15 años, La Universidad de Antioquia ha realizado obras para integrarse con el resto de Medellín, tarea que espera concluir al quitar las vallas que la circundan. “Queremos que la universidad no se convierta en un espacio aislado, negado a la ciudad, sino que se integre”, explica Mauricio Londoño, director de logística e infraestructura de la institución. Entre otras obras, la universidad ha contribuido con el municipio en el diseño del espacio público de las zonas del Parque Explora, el Parque de los Deseos y Ruta N. Allí construyó el edificio de extensión.