Especiales Semana

COMPUTACION

19 de noviembre de 1984

Cuando en su edición final de 1982, la revista norteamericana TIME le otorgara al computador el título del suceso del año, poca gente se llegó a imaginar que el fenómeno de popularización de la máquina, que en ese entonces se circunscribía casi exclusivamente a los Estados Unidos, llegara a extenderse tan rápidamente a otras partes del mundo. Las agresivas campañas de comercialización y la introducción de nuevos modelos de parte de las compañías del ramo, "invadieron" a los países industrializados y a algunos en desarrollo. El mercado está en su apogeo y cada año se rompen los récords de ventas de computadores.
Por ejemplo, en los Estados Unidos se estima que las ventas de computadores personales para la oficina, pasarán de un millón setecientas mil unidades en 1983, a seis millones doscientas mil en 1987, y se cree que la cifra del resto del mundo no será inferior. A parte del norteamericano, los mercados de más dinamismo actualmente son los de Europa Occidental y el Japón, donde firmas locales han entrado a disputar el monopolio del que han disfrutado normalmente empresas como IBM, Hewlett Packard, Digital y Apple.
Por su parte, las naciones subdesarrolladas se siguen limitando a su papel de observadoras de la "revolución informática", especialmente en el área de la tecnología. Descontando a ciertos países del sudeste asiático, donde se encuentran plantas de producción de algunas multinacionales, es mínimo el aporte que se hace en materia de diseño o de nuevos componentes.
Con todo, sí ha habido algún avance en lo que tiene que ver con disponibilidad de equipo. Aunque las cifras globales de ventas de computadores al Tercer Mundo son imposibles de conseguir, los casos de países individuales permiten afirmar que es posible adquirir equipos de un buen grado de tecnificación en zonas de Latinoamérica, Africa y Asia.
La anterior afirmación se comprueba fácilmente en el caso de Colombia. En el lapso de los últimos 14 años, las importaciones de computadores han pasado de 497 unidades en 1970, a 16.001 en 1983. La "factura" de cobro de esos equipos también ha seguido un ritmo similar al pasar de cerca de dos millones y medio de dólares a comienzos de la década anterior, a 45 millones de dólares el año pasado.
Como es lógico, ha sido mucho lo que ha cambiado el mundo de los computadores desde 1970 y es imposible comparar tecnicamente una máquina promedio de hace 15 años, con una producida hoy. Hay que recordar que en el espacio intermedio se pasó del transistor al "chip" de silicio y de allí al microprocesador, elementos que rebajaron sustancialmente el costo y la maniobrabilidad de los computadores de esta epoca. Debido a tales adelantos fue técnica económicamente posible construirlos ahora conocidos computadores personales, el primero de los cuales rodó de la línea de ensamblaje de Apple en 1976. De ahí en adelante se empezó a vivir la popularización del computador que sigue en boga hoy en día. Ahora, como en el mercado de casas o de automóviles, hay computadores para todos los gustos y presupuestos. Desde los Commodore que cuestan cerca de 200 dólares y que sirven para llevar la contabilidad doméstica y ensayar algunos juegos electrónicos, hasta grandes sistemas como los DEC que son usados por miles de usuarios y cuyo costo puede alcanzar los cientos de miles de dólares. En el grupo del centro están los computadores personales, destinados a cierto tipo de profesionales, y los de oficina, que poseen características más completas.
El tamaño del mercado de computadores en general, ha ocasionado una feroz competencia entre las diversas compañías que se dedican a su producción, con lo cual no es raro que una firma mejore sus modelos dos o tres veces al año. Como resultado, la "mortandad" de compañías ha sido alta y en el valle del Silicón en California --calificado como el santuario de las empresas del ramo-- las quiebras se han contado por decenas.
Entre los que han quedado "tendidos en el campo" se cuentan colosos como Texas Instruments, que cerró su división de computadores personales Xerox, que está a punto de hacerlo, y Atari, que atraviesa momentos difíciles.
Aparte de los quebrantos de compañías individuales, quien ha resultado beneficiado ha sido, indudablemente, el consumidor. Al igual que lo ocurrido con las calculadoras electrónicas en su epoca, los costos se han reducido y con ellos el precio de venta. Como ilustración, una publicación especializada cita que el primer computador Apple costaba, hace ocho años, unas cuatro veces más de lo que una máquina comparable hace ahora.
En terminos generales la dinámica del mercado de computadores se ha orientado hacia los de tamaño intermedio, que cuestan entre 1.000 y 5.000 dólares en los Estados Unidos. Tanto en la oficina, como en la casa, el uso de la máquina se ha ido popularizando, de tal manera que no se ve lejana la fecha en la que las ventas acumuladas lleguen a los 30 millones de unidades a nivel mundial.
En el caso de Colombia, el país también ha sentido las mismas tendencias observadas a escala internacional. En la actualidad, existen cerca de cincuenta firmas representadas que han dirigido sus ofertas en el área de equipo de oficina, en su mayoría. La actual coyuntura es un poco difícil debido a la restricción de importaciones y a la existencia del contrabando que ofrece computadores a precios mucho más bajos que los importados legalmente. La tendencia a importar equipos más pequeños y de menor costo se ve clara si se mira el valor promedio unitario de los equipos importados. Este llegaba a 5.020 dólares en 1970, subió hasta casi 8.000 en 1974 y en lo que va de la década ha disminuído hasta colocarse en 2.821 dólares en 1983. La diferencia anterior se amplía aún más si se tiene en cuenta el efecto de la inflación.--