CONSTRUCCION, VIVIENDA Y DECORACION

EL REFUGIO
Las técnicas de construcción han avanzado considerablemente en los últimos años en materia de seguridad. Con frecuencia se oye hablar, por ejemplo, de bases antisísmicas o de sistemas antiinflamables. No obstante, en la actualidad el reto de muchos de los arquitectos que se han dedicado a evaluar las características, los problemas y las necesidades del mundo moderno es el diseño de una vivienda que se convierta en el "refugio del estrés", en el oasis para escapar de las preocupaciones del trabajo y de la fatiga de las metrópolis.
A primera vista surge la idea de una fortaleza similar a la de la pobre viejecita, con 8 criados y 3 pajes de librea y corbatín.
Con jardines colgantes como los de Babilonia y otras cuantas de las maravillas del mundo reunidas en un solo lugar.
Pero si se contara con la capacidad económica suficiente para lograr un paraíso de este tipo, posiblemente no se buscaría el refugio del estrés en la propia casa, sino en periódicos viajes a las islas del Caribe y en cruceros por el mar Mediterráneo.
La idea es que a partir de lo que se tiene se pueda perseguir esta ambición. Las investigaciones señalan que el trabajador llega a su vivienda con una fuerte dosis de estrés que ha conseguido por las presiones laborales, las angustias del dinero, la contaminación, las congestiones de tránsito y otros factores similares.
Aunque lo más adecuado -en busca del refugio- es transformar la vivienda inicial de acuerdo con un estudio del perfil de sus habitantes, existen ciertas reglas o recomendaciones generales. He aquí algunas de ellas: -Carácter campestre: vivir en las afueras de la ciudad no siempre es fácil. Se gana en espacio y en tranquilidad, pero la distancia puede convertirse en un enemigo. A veces se recomienda dotar a la vivienda urbana de algunas de las características de las casas campestres, tales como zonas verdes, cabañas en el patio y juegos infantiles. Inclusive algo más sencillo: buscar la cercanía de un buen parque.
-Decoración: la presencia de pinturas, papel de colgadura y adornos llamativos (artesanias, antiguedades o esculturas) pueden convertir un lugar frío en uno definitivamente cálido.
-Jardines: así se trate de un apartamento reducido, la presencia de plantas ornamentales y flores de colores vivos ayudará a esa sensación de reposo y tranquilidad.
-Agua: tal vez el espacio no siempre se preste para la construcción de una piscina. Sin embargo, montar un sauna o un jacuzzi no es tan costoso como suena y constituye un verdadero logro en la lucha contra el estrés.
-Animales: las mascotas colaboran en el propósito de crear un ambiente que aleje las preocupaciones del trabajo. Un perro faldero, un gato, un par de canarios o unos peces pueden ser la solución.
Si a medidas urbanísticas de este tipo se le suman prevenciones como la de nunca llevar trabajo a casa, con seguridad el nivel de estrés reducira considerablemente. Y a menor estrés, más vida... en cantidad y en calidad.