Especiales Semana

Eduardo Montealegre

El magistrado salomónico

15 de diciembre de 2003

El abogado penalista Eduardo Montealegre presidió la Corte Constitucional durante el año de la gran arremetida contra la Constitución de 1991. La Corte revisó medidas trascendentales para la vida nacional como los decretos de la conmoción interior, el referendo, el aumento de la base gravable del IVA y la reforma a la justicia y en cada una de sus decisiones demostró gran equilibrio. Salvó el referendo, pero le quitó las 'golosinas' al texto que afectaban la libertad del votante. Decretó la constitucionalidad de la conmoción interior y del impuesto al patrimonio pero tumbó las facultades de policía judicial a los militares por estar explícitamente prohibidas en la Carta. En su fallo sobre el IVA autorizó al gobierno a gravar otros bienes, incluso de la canasta familiar, pero sólo si demostraba que poner a tributar a los más pobres era su último recurso. Montealegre, de 46 años, con su espíritu alegre y apasionado atacó con vehemencia pero con gran altura el proyecto de reforma a la justicia elaborado por el entonces ministro del Interior y de Justicia, Fernando Londoño. Su reacción seria y oportuna obligó al gobierno a reconsiderar una propuesta que habría enterrado grandes conquistas para el ciudadano como el de la tutela para derechos económicos y sociales. Durante este año de discusiones dialécticas con el gobierno, este magistrado se convirtió en el símbolo de la separación de poderes en Colombia.