Especiales Semana

ESTILOS Y ELEMENTOS

CONSTRUCCION PAISA: BALANCE POSITIVO, 24092

14 de noviembre de 1994

EL PLATO FUERTE
En la elaboración de cocinas modernas el mármol y el granito están desplazando a los demás materiales, por su durabilidad y facilidad de mantenimiento.
LAS PIEDRAS DUras han sido desde hace más de 4.000 años, protagonistas esenciales de la historia del hombre. Es por excelencia el material más usado por la civilización humana pues se conoció antes del adobe, el ladrillo, el hierro, el vidrio y el cemento. Su utilización no solo se limitó a la edificación de viviendas, sino que se convirtió en la expresión artística, cultural y religiosa de pueblos como los egipcios, los asirios, los griegos y los romanos.
Los primeros vestigios se encontraron en la Mesopotamia y Egipto donde estos materiales se utilizaron para esculpir las estatuas de los dioses, reyes y héroes. El Granito rojo y negro conferia a estas figuras un carácter de permanencia, exaltación e inmortalidad difícil de igualar. En cambio los relieves y retratos se trabajaban en piedras más suaves como el mármol o el alabastro, que permitían labrados mucho más detallados y fieles al original. La apariencia era más natural y su versatilidad facilitaba la aplicación de tintes que resaltaban su belleza.
Símbolo de pureza y eternidad, el mármol y el granito se convirtieron rápidamente en un privilegio de artistas. Los griegos usaron variedades de mármol blanco brillante, con visos rosados o amarillos para tallar la figura humana ya que se daban colores bastante aproximados a los de la piel. También utilizaron este material como elemento arquitectónico pero sólo en lugares públicos como la Acrópolis de Atenas o el Templo de Diana en Efeso. Pero en Roma se utilizó -tanto el granito como el mármol- dentro de las casas, ya que eran materiales que daban una imagen de opulencia a quienes los poseían. Y fueron los romanos los que aprovecharon la gran variedad de mármoles que había en el Mediterráneo.
Luego de la caída del Imperio Romano, los reinos cristianos que heredaron esas construcciones utilizaron lo que quedó de las ruinas como una especie de reciclaje y construyeron las grandes basílicas de la Edad Media. Por esta época se conformaron en Europa los primeros gremios de artesanos de la piedra, los cuales casi que monopolizaron el manejo de mármoles y granitos para el levantamiento de palacios, catedrales y edificios públicos.
Sin embargo el Renacimiento fue tal vez la época de oro, sobre todo del mármol pues fue el elemento imprescindible de las bellas artes en Italia. El escultor Miguel Angel afirmaba que la piedra hablaba por sí misma y que era ella quien expresaba y pedía ser convertida en una figura determinada. Esculturas tan famosas como el Moisés, del propio Miguel Angel, o Il Pienseroso, de Rodin, estan hechas en este material.
Durante el siglo XIX el granito fue el que se llevó las palmas. La resistencia al desgaste generó que fueran muchos los arquitectos que lo solicitaran para construir obras arquitectónicas de gran importancia, como el Panteón y LesInvalides en París, o la Puerta de Brandenburgo en Berlín.

COCINAS DEL LUJO
En este siglo se industrializó la explotación del mármol y el granito y abarcó otros espacios de la vida cotidiana del hombre moderno como la cocina. La moda ha impuesto el uso de materiales naturales en la construcción dejando atrás los materiales fabricados, sintéticos o plásticos.
El granito es una piedra de color uniforme cuya textura granulada obedece a la cristalización de componentes ígneos durante millones de años. Algunos tipos de granitos ostentan vetas longitudinales por lo que pueden parecerse a los mármoles. Su brillo y dureza son de tal calidad que lo convierten en un material ideal para hacer mesones de cocina. Como en una cocina hay múltiples sustancias que entran en contacto con la superficie del mesón, el granito no se deteriora o cambia de tonos como otros elementos usados en los mesones.
El mármol cuenta con la belleza de una amplia variedad cromática, consecuencia de procesos de sedimentación de elementos orgánicos y minerales mediante la acción de altas presiones y temperaturas elevadas. La irregularidad de sus vetas y las formas caprichosas que surgen en su superficie hacen del mármol un material exquisito para utilizarse en los acabados de las cocinas. Las cualidades fisico químicas de los mármoles limitan los usos que se les puedan dar.
Estos dos tipos de piedras se constituyen en el material más utilizado para la elaboración de elementos de alta resistencia en las cocinas. Su fácil mantenimiento y la variedad de tonos y texturas existentes, les dan una gran versatilidad a la hora de combinar. Esta moda, que no hace mucho entró en el país, ha terminado por imponerse en el montaje de las más hermosas y elegantes cocinas de Colombia.-