Especiales Semana

GANADO

27 de febrero de 1989

El ganado es un negocio perdido... por lo menos por ahora. En 1988 tanto los precios del kilo de carne en pie, como el del que se le vende al consumidor disminuyeron en términos reales frente a los de 1987. Y eso no es todo. Los expertos consultados por SEMANA opinan que este año los precios de venta de la carne, tampoco deben aumentar dramáticamente. En opinión de Alvaro Balcázar, del Centro de Estudios Ganaderos (CEGA), "los níveles actuales se deben mantener en términos nominales, pero habrá una disminución de precios en términos reales ".

Las causas de esa situación son varias. Según un ganadero, "estamos en el punto más bajo de un ciclo depresivo que dura siete años". Esta circunstancia habría sido agravada por un aumento en la oferta que, para algunos, es consecuencia de la inseguridad en el campo. Según este análisis, en sarias zonas del país la gente ha decidido vende sus reses sin importar el precio, con tal de salirse de las áreas de violencia. Adicionalmente, el consumo de carne de res ha descendido, en beneficio de la carne de pollo, los huevos o la leche (ver cuadro). También hay indicios de que el hato ganadero sigue aumentando. Según el Ministerio de Agricultura, el total de cabezas pasó de 23.3 millones en 1985 a casi 24 millones en 1987.

Estas cifras indican que definitivamente la inversión en ganado no es buena en el corto plazo. No obstante, Alvaro Balcázar del CEGA, piensa que en dos o tres años el mercado va a repuntar después de que pase la temporada de los precios malos. "Lo mejor ahora sería invertir en cria. Puede ser interesante comprar novillas para vender los terneros dentro de dos o tres años, cuando haya pasado la crisis", dice. También es bueno tener en cuenta que los precios cambian dependiendo de la región y el país. Segun el CEGA, los más altos se registran en Medellin, seguidos por los de Bogotá, Villavivencio y Montería.
En la capital de Antioquia el valor del kilo en pie, tipo vacuno macho de primera, es un 20% más alto que en la capital de Córdoba.

Existe otro factor que puede influir en que las condiciones cambien. Aunque no se ha podido medir su impacto, hay ganaderos que sostienen que han pagado las consecuencias del contrabando de carne de res y de pollo desde Venezuela. Si existe, ese flagelo deberia estar llegando a su fin.
Todo indica que la administración que asume el poder esta semana tiene intenciones de devaluar el bolivar lo cual encarecera seguramente el precio de los alimentos en el vecino país.

Sin embargo, esa posibilidad es demasiado débil para decir que el mercado del ganado va a cambiar en los próximos meses. Aun los optimistas reconocen que las vacas gordas no han llegado y que no es bueno invertir en el sector, a menos que usted desee dejar su dinero pastando. -