Especiales Semana

GANAR A TODA COSTA

Las 500 más grandes de Estados Unidos aumentaron más las utilidades que las ventas y continuaron con la tendencia a reducir el número de puestos de trabajo para aumentar la productividad.

22 de mayo de 1995

LA REGION OCCIdental de Estados Unidos se convirtió en la más próspera de ese país el año pasado. Y la razón es que estuvo empujada por empresas como Chrysler y otras del sector automotor, que en la mayoría de los casos arrojaron balances sorprendentes. General Motors, por ejemplo, fue de nuevo la primera en ventas y Ford Motor la segunda, según la clasificación realizada por la revista Forbes sobre las 500 más grandes de ese país en 1994.
Según el ranking, los ingresos por ventas de las compañías aumentaron a un ritmo más lento que el de las ganancias, pues las primeras crecieron 8,0 por ciento, en tanto que los beneficios lo hicieron en 23 por ciento al sumar 250.000 millones de dólares. Y si se mira por volumen, las ventas crecieron aún menos, lo que muestra que las firmas están escogiendo la vía de realizar actividades que les brinden un rápido crecimiento en sus utilidades y no tanto en sus facturaciones. Las de mayores utilidades fueron también las dos ensambladoras de autos, seguidas por la petrolera Exxon, General Electric, Philip Morris -productora de Marlboro-, AT&T y la también ensambladora de carros Chrysler. Los activos de las más grandes, por su parte, aumentaron 9,0 por ciento, siendo Federal National Mortgage la más grande, seguida por Citicorp y Ford. Las adquisiciones de compañías y las diversificaciones han ocasionado, según Forbes, incrementos importantes en el tamaño de muchas empresas. Es el caso de American Home Products, que pasó de tener activos por 14.000 millones de dólares a 21.700 millones de dólares, después de comprar American Cyanamid.
Una corriente que caracterizó de nuevo a la economía norteamericana el año pasado fue la caída en el empleo. Sin embargo, no se trata de un fenómeno nuevo, pues en los últimos 10 años éste ha disminuido en 7,0 por ciento. Según el análisis de Forbes, pese a los efectos que tiene ese bajonazo, también es cierto que hay casos en los cuales ha ocasionado un aumento en la productividad de las empresas. Esa es la historia de Clorox, cuyo número de trabajadores cayó en 14 por ciento entre 1984 y 1994, pero las ventas crecieron 32 por ciento en el mismo período. Las fusiones y adquisiciones también se han convertido en una forma de estimular la productividad, de acuerdo con la publicación. Y además, la fiebre por reestructurarse y reducir costos ha terminado por afectar favorablemente la inflación de Estados Unidos.
Y como la economía no se queda quieta, Forbes realizó esta vez un listado de las empresas que van a entrar próximamente dentro de las 500 más grandes. Se trata de compañías dedicadas a tarjetas de computadores personales, comunicaciones, sistemas de fibra óptica y productos de belleza, entre múchas otras. Y -entre las que ya están dentro del ranking, la revista hizo una clasificación de las que están más preparadas para resistir una recesión. Entre ellas aparecen Laboratorios Abbott, Anheuser-Busch, Coca-Cola, Hershey Foods, Johnson & Johnson, Mc Cormick, Mc Donalds, Microsoft, Pepsico, Schering-Plough y Wal-Mart Stores. La razón es que ya soportaron la recesión de 1990 y 1991 sin graves efectos sobre sus ganancias, y que han tenido crecimientos importantes en los últimos años.-