Especiales Semana

Imperios bajo fuego

Los monopolios también reciben bofetadas, y eso está ocurriendo en los mercados tecnológicos.

5 de noviembre de 2001

El exceso de peso y la falta de ejercicio convierten a algunos monopolios en paquidermos incapaces de reaccionar a los ataques de la competencia. Acostumbrados a un reinado fácil en mercados sin rivales, imperios de diversas tallas tendrán que afrontar este año el reto de sobrevivir después de que algunas hegemonías fueron rotas en los mercados tecnológicos y otras se encuentran seriamente amenazadas por retadores audaces.

Ocurre en el mercado de la fibra óptica en Bogotá, donde TV Cable, tras una presencia exclusiva durante casi 14 años y acumular quejas por abusos en la facturación, pésimo soporte al cliente y cuestionada velocidad de conexión, abonó el terreno para que nuevos oferentes de acceso a Internet en banda ancha empiecen a arrebatarle el mercado. Supercable ofrece paquetes que incluyen televisión e Internet por menos de la mitad del precio de TV Cable, con señal completamente digital y mayor flexibilidad en las tarifas, en tanto que los antiguos operadores de antenas parabólicas, hoy convertidos en operadores de cable, como Cablecentro y Superview, atacan los estratos medios y bajos con tarifas de televisión hasta 80 por ciento inferiores a las de TV Cable. Adicionalmente, con su servicio de Adsl mediante el tendido de cobre, la Empresa de Teléfonos de Bogotá le está arrebatando el pequeño mercado corporativo que posee. Operadores telefónicos en otras ciudades planean hacer lo mismo, con lo que el país podría gozar en 2002 de una refrescante ola de nuevas opciones de acceso a Internet en banda ancha, hasta ahora un privilegio de las grandes empresas o de los estratos 5 y 6.

Por otra parte, al ‘duopolio’ establecido en el país para la telefonía celular le sonó la campana antes del fin de año en medio del aplauso de quienes apoyan la libre competencia y el desarrollo de las telecomunicaciones. Luego de siete años de exclusividad, y a pesar de la resistencia ofrecida por los operadores celulares, el gobierno ratificó su decisión de poner en marcha la licitación para nuevos servicios móviles en el rango conocido como PCS, que ofrece mejores posibilidades técnicas y que, según los expertos, mejorará la calidad del servicio, reducirá las tarifas y ampliará el mercado. Los operadores celulares actuales se opusieron durante largo tiempo a esta licitación y BellSouth llegó al extremo de, en un acto suicida de imagen, amenazar al gobierno con demandar la licitación. Pero la ministra Angela Montoya, tras estudiar el tema cuidadosamente, confirmó que este año los colombianos tendrán nuevas opciones en telefonía móvil.