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"La FIB ha hecho un aporte histórico a la industria colombiana"

El director de Corferias, Hernando Restrepo Londoño, habló de la XXV Feria Internacional de Bogotá y su importancia para la ciudad, la industria y la economía de país.

24 de septiembre de 2004

SEMANA: ¿Qué significa celebrar en el mismo año la vigésimoquinta versión de la FIB y los 50 años de Corferias?

Hernando Restrepo Londoño: Es algo histórico. Corferias nació en 1954 para ofrecer desde Bogotá una feria internacional, y el hecho de que se celebre en el mismo año el aniversario del recinto y del evento que lo originó es muy significativo. Estamos celebrando lo que ya fuimos, la satisfacción de lo que somos y proyectando para dónde vamos.

SEMANA: ¿Qué se puede esperar de la presente versión de la FIB?

H.R.L.: La feria llega en una coyuntura muy buena. Al contrario de años anteriores, la economía del país está creciendo, lo que ofrece un buen panorama para hacer negocios y para que la industria crezca. La consolidación de la economía colombiana aporta el escenario perfecto para que las empresas se actualicen, pensando sobre todo en que con la cercanía de políticas como el Tratado de Libre Comercio, la actualización es necesaria para empezar a competir. Se está creyendo más en el país. La situación del país es favorable y eso se va a reflejar en el desarrollo de la feria.

SEMANA: ¿Y en materia de novedades?

H.R.L.: Además de todo lo que ya ofrece, este año la conciencia de la necesidad de educar a las empresas ha creado la coyuntura para plantear diversas actividades académicas sobre los temas más relevantes. Además, desde hace algunos años tomamos la decisión de especializar la feria y para cada una de sus versiones trabajamos más en ese sentido. Este año la novedad es la sectorización: los productos van a estar ubicados por sectores y no por países, como antes.

SEMANA: ¿Por qué se tomó la decisión de sectorizar la FIB?

H.R.L.: Dijeron que era muy difícil hacer contactos comerciales porque los bienes de consumo atraían a toda la multitud y era muy difícil distinguir los clientes potenciales entre esa gran masa. No podían promocionar una máquina porque el 90 por ciento de los asistentes eran curiosos que se interesaban en otros productos. Ante sus quejas nos dimos cuenta de que la feria se estaba alejando de su objetivo y tomamos decisiones como crear otros eventos para los bienes de consumo y especializar la feria, con muy buenos resultados.

SEMANA: ¿Qué beneficios trae la FIB para la industria en general y para segmentos como la pequeña y mediana empresa?

H.R.L.: Se benefician en la medida en que pueden actualizarse y hacer lo posible para prepararse para la competencia. La industria del país se desarrolla, evoluciona y puede así entrar al escenario internacional con mejores argumentos. En ese marco caben la pequeña y mediana empresa, que obtiene los mismos beneficios y otros como darse a conocer en el medio y acercarse a la tecnología del exterior que no puede ir a buscar.

SEMANA: En ese sentido, ¿cómo contribuye este evento al crecimiento de la economía colombiana?

H.R.L.: Ayuda a industrializar el país. Esta feria ha hecho un aporte histórico a la industria colombiana: durante los 50 años miles de empresas han adquirido su maquinaria y su tecnología en el marco de la Feria Internacional de Bogotá. Ese ha sido el común denominador en la historia de la realización de la feria.

SEMANA: ¿Cómo se ve beneficiada la ciudad con la FIB?

H.R.L.: Primero que todo hay que hablar de los recintos feriales en el mundo: el 99 por ciento son estatales porque la organización de una feria en cualquier ciudad o país es benéfica. En ese sentido, Bogotá se la ha jugado con Corferias porque ha obtenido buenos réditos, como que somos la empresa que garantiza la mayor ocupación hotelera en la ciudad, sin contar que con cada feria llegan muchas personas que utilizan el transporte, los hoteles, restaurantes y demás servicios que ofrece la ciudad. Además, debido a nuestra extensa actividad ferial, somos el mayor generador de empleo transitorio que tiene la empresa privada de la capital del país. También queda la imagen de la ciudad, que se posiciona como un escenario propicio para los negocios en Latinoamérica y el mundo.

SEMANA: ¿A futuro, qué proyección tiene esta feria?

H.R.L.: En la medida en que se vayan consolidando la economía y la situación de orden público del país, estaremos en capacidad de incrementar la actividad ferial y, con ello, todos los beneficios que esto trae para la ciudad, el país y su economía.