LAS 100 EMPRESAS MAS GRANDES DE COLOMBIA

AVECES A LA GENTE SE LE OLVIDA UNA verdad de a puño cuando evalúa el panorama productivo: la suerte de las empresas navega sobre las olas de la economía nacional. Y cuando éstas tienden a calmarse no hay empresa que pueda avanzar de a mucho. Así se puede resumir el comportamiento de las 100 empresas más grandes de Colombia durante 1995: su desempeño empezó a flaquear amedida que la economía se desaceleraba.
El análisis que se presenta en las páginas siguientes no deja duda al respecto. Las principales compañías vieron reflejada en su comportamiento la disminución del crecimiento del Producto Interno Bruto, de 5,8 por ciento en 1994 a 5,3 por ciento el año pasado. A pesar de que los activos de las 100 crecieron 34 por ciento en 1995 y su patrimonio 40 por ciento, no todo fue color de rosa: no obstante que las ventas globales crecieron en 1995 casi lo mismo que en el año anterior=24,5 por ciento, frente a 25 por ciento en el 94 , las utilidades entraron en barrena al caer 18 por ciento para las 100 compañías más grandes del país respecto a 1994.
Otros indicadores del informe confirman la destorcida que empezó a sufrir la actividad empresarial durante el año anterior. Mientras en 1994 sólo siete de las 200 empresas consideradas registraron saldos en rojo, en 1995 fueron 29 las compañías que tuvieron pérdidas. Por el lado del sector financiero las cosas no fueron mejores: el año pasado 14 entidades perdieron dinero, en tanto que en 1994 ninguna entidad había sufrido tal suerte.
Como ha sido tradicional en este informe, entre las 200 empresas evaluadas no se tuvieron en cuenta las de servicios públicos, que son analizadas independientemente. En esta edición se han introducido algunas novedades para facilitar la consulta del informe: por un lado se presentan las 100 empresas más grandes y las 100 siguientes por orden alfabético (páginas 116 y 214); adicionalmente se ofrece un índice general de cuadros en la página 218. Como siempre, la información utilizada para el análisis corresponde a los datos enviados a SEMANA por más de 200 empresas, así como a la consulta de fuentes alternativas como las cámaras de comercio. Sólo resta esperar que el informe del año entrante permita afirmar que lo de 1995 fue tan sólo un susto.