Especiales Semana

NAVIDAD

7 de enero de 1991

MESA Y DECORACION
Cuando se piensa en una mesa llegan a la memoria imágenes sencillas que la describen como un objeto cotidiano. Sin embargo, su simplicidad lleva consigo la complejidad de una familia.
Porque una mesa es el sitio de reunión de un hogar. Ha visto crecer a los hijos, lleva grabado en su interior risas y regaños, alegrías, voces, silencios y miradas.
Una mesa sufre y goza con sus dueños. Una mesa es conversación, pero también es sabor. Es año nuevo y es Navidad.
Y precisamente cuando se acercan las festividades decembrinas y surgen los interrogantes por la comida, es importante recordar que aquel objeto de todos los días, debe recibir la suficiente atención.
Porque una cena perfecta de Nochebuena debe estar acompañada por la decoración adecuada de la mesa. Y es que en medio de la alegría y la algarabía decembrinas y entre tradiciones y costumbres, ningún recurso puede desaprovecharse.
Es en ese momento cuando los detalles entran a formar parte importante de la agenda decorativa de Nochebuena. Aquellos pequeños recortes de espíritu que colocan un toque de ambiente a los hogares y visten con acogedores colores las mesas navideñas.
Servilleteros, manteles, individuales, canastas, velas, candelabros de porcelana, arreglos en pino, coronas, campanas navideñas, recipientes y mil detalles más ayudan a dar un ambiente cálido y original al hogar.
Sin embargo, una buena alternativa es comenzar por escoger un arreglo estilo buffet en el que se luzca un moderno mantel con sus servilletas compañeras.
Pero además se puede elaborar un adorno en pino que evoque imágenes de antaño y brinde un ambiente agradable al menú de la cena navideña. Tres detalles que representan el primer paso para iniciar el festival de detalles que vestirán la mesa de la noche del 24 .
Una actividad que no sólo necesita objetos curiosos sino también toneladas de imaginación y originalidad, los secretos de una cena inolvidable.