Especiales Semana

PIERNAS ARRIBA

Fueron la mejor arma para seducir no sólo a los cartageneros sino también al jurado. Las hubo para todos los gustos.

9 de diciembre de 1996

Sin duda alguna fueron las protagonistas en Cartagena. Cada vez que desfilaron fugazmente por la pasarelas estuvieron de boca en boca. Mientras unos las defendían, otros las atacaban. Y unos más se conformaban con decir que en épocas pasadas fueron mejores. Los elogios, las críticas y las pasiones corrieron por cuenta de las piernas de las 22 candidatas que este año estuvieron presentes en Cartagena. Cuando el asunto fue de piernas, las candidatas de Huila, Maritza Rubio, y Bogotá, Debbie Castañeda, se robaron todas las miradas. Las de Maritza, largas, delgadas y elegantes, en cada desfile lograron deslumbrar en las pasarelas. Debbie Castañeda conquistó al público con sus voluptuosas piernas, que dejaron a más de uno sin respiración. En este pleito también terció la representante del Chocó, Zolima Bechara Palacios, quien para muchos tenía las mejores piernas del concurso.Pero así como las hubo espectaculares, otras no se libraron de la maldición de la celulitis. En este terreno la más perjudicada fue la candidata de Sucre, Ana María Neira, quien desde el comienzo se convirtió en una de las más opcionadas al título de Señorita Colombia. Sin embargo la sucreña no tuvo tanta fortuna con sus piernas, que pasaron inadvertidas en cada uno de los desfiles.Otro grupo de piernas fue clasificado en el rango de PC , que en cristiano significa Piernas Cortas. La gran ganadora de esta categoría fue la candidata de Meta, Pilar Schmitt. Las piernas de esta hermosa y descomplicada llanera pasaron sin pena ni gloria, pues además de cortas su diseñador tuvo la brillante idea de taparlas con el vestuario. Eso mismo pasó con Liliana Camacho, representante de Cartagena; Glenda Marcela Mitchell, de San Andrés; Sandra Liliana Mejía, de Putumayo, y Liliana Mantilla, de Amazonas. Sus piernas se perdieron entre las lentejuelas y los canutillos.Pero, más allá de los sueños y las pasiones, las piernas jugaron un papel definitivo para la elección de la nueva soberana de la belleza. En ellas se cimentó la carrera por lo corona. Al final hubo una sola ganadora. No obstante los colombianos tuvieron la oportunidad de apreciar piernas largas, cortas, delgadas, torneadas, flácidas, firmes, parejas y disparejas y sus ojos nunca dejaron de admirarlas.