Especiales Semana

SEGUROS

29 de octubre de 1990

LOS SEGUROS EN LOS 80'S Evaluación y perspectivas
En el siguiente artìculo, el Presidente Ejecutivo de Fasecolda, William Fadul, hace un balance del comportamiento del sector asegurador durante la decada de los ochenta y plantea algunas perspectivas para el futuro.

El texto hace parte del editorial del número 52 de la revista Fasecolda, próxima acircular.

Concluida la década de los ochenta, con las cifras del período disponibles, y dado el profundo cambio sufrido recientemente por el sector asegurador colombiano, es bueno hacer un recuento de lo acontecido en dicho lapso y plantear así sean arriesgadas las afirmaciones que se formulen una evaluación de los resultados alcanzados y algunas predicciones y advertencias para los años porvenir.

Seguros y economía
Durante la década pasada la economía creció a un ritmo real promedio del 3.3%, cifra que contrasta con la de las primas emitidas por las compañías de seguros, que bhicieron al 9.2%. Aun cuando existe cierto paralelismo entre estas dos variables, se observa que el crecimiento del sector asegurador ha estado por encima del crecimiento del producto interno bruto (PIB), en un 5.9% anual (vercuadro No. 1).

Sectorialmente este comportamiento se aprecia así:

a. La industria manufacturera, en el período analizado, creció al 2,5% mientras que las primas de ramos como ingeniería e incendio, lo hicieron a un ritmo del 21.8% y 9.3% respectivamente.

b. El llamado sector de servicios se incrementó, en el mismo lapso, al 3.2% real, mientras que los ramos que más se asimilan a él, como automóviles, salud y colectivo y grupo, lo hicieron al 26.9% 0,6% y 11% en su orden.

Indicadores Gastos generales y comisiones
Los gastos generales y las comisiones se elevaron al 5.4% y 8.4% anual, respectivamente (ver cuadro No. 2). Por su parte, la relación de gastos generales a primas, como indicador de productividad, ha venido mejorando a partir de mediados de la década, hasta alcanzar el 21% durante 1 989.

La relación de comisiones a primas emitidas mantuvo un comportamiento estable (14%) y presentó una leve disminución del 1%, disminución que resulta ser menor que la registrada por el indicador de gastos generales a primas emitidas.

Siniestros pagados y siniestralidad
Los siniestros pagados crecieron al 12.2% descontando el efecto de la inflación. Por su parte, la siniestral Wad por cuenta de la compañía, entendida como la relación entre siniestros retenidos y las primas retenidas (es decir, incluyendb el movimiento de reaseguros y, además, el juego de reservas técnicas y siniestros pendientes) mostró una proporción promedio de 49.95%, que ha venido oscilando a lo largo de los años ochenta, arrojando un pequeño crecimiento promedio real del 2.4%. Sin embargo, se observó que a partir de la segunda mitad de ladécada la tendencia de ésta se ha acelerado (cuadro No. 2).

Inversiones
A pesarde que el producto financiero de las inversiones, tanto admisibles como forzosas, tuvo un comportamiento errático en la década pasada, durante los últimos cuatro años de la misma se ha registrado un crecimiento real promedio del orden del 1.7%.

Lo sucedido en 1983 y 1984, cuando se llegó a un promedio del 23.3% y 0.3%, respectivamente, obedece a la coyuntura de la crisis del sector financiero, lo cual incidió en el rendimiento promedio de la cartera de inversiones.

Utilidades
Las utilidades crecieron al 11.2% en el lapso analizado, aun cuando el período no tuvo un comportamiento uniforme, si se analizan separadamente el primero y el segundo quinquenio. Mientras que en los primeros cinco años las utilidades decrecieron aproximadamente en 23%, para los últimos cinco años éstas presentaron un aumento real promedio del 21.7% (cuadro No.3).

Por su parte, la relación utilidad primas fue, en promedio, del orden del 6.6%, con un crecimiento inferior al 2%, lo cual muestra, junto con el indicador de patrimonio, uno de los frentes que el sector asegurador debe tener presente en la toma de sus decisiones, ante las nuevas exigencias de patrimonio técnico mínimo y de margen de solvencia. En particular, la evolución de las utilidades es de vital importancia para que el sector tenga una respuesta adecuada a dichos requerimientos, ya que ésta representa la principal fuente de fondos en el futuro, para no tener que solicitar recursos extraordinarios para los accionistas.

Patrimonio
El aumento patrimonial, descontadò el efecto de la inflación, fue del 8.5% en el período, con una marcada inflexión porcentual en 1986 y 1987 (41.8% y 42.7%).

Lo anterior se explica al evaluar individualmente cada uno de los componentes del patrimonio (capital pagado, superávit ganado y valorizacines), ya que en 1985 el superávit presentó una caída del 19% respecto al año inmediatamente anterior. Esta circunstancia fue superada en 1986 con un crecimiento real del superávit del 14% y del 79% en las valorizaciones.

Por otra parte, las exigencias de patrimonio consignadas en la resolución 1100 de 1989, llevaron a que el capital pagado tuviera un crecimiento del orden del 52% endicho año, lo cual representa aproximadamente $5.000 millones adicionales.
Dicha tendencia se mantendrá en 1990, pues el 15 de noviembre se deberá alcanzar el patrimonio técnico mínimo exigido en la mencionada resolución.

En cuanto a la relación utilidad patrimonio, siguiendo metodológicamente el mismo orden de análisis anterior, se observó que ésta fue en promedio del 14% y tuvo un crecimiento real anual del 2.48%.

Perspectivas
Las advertencias y apreciaciones para el sector de seguros, en los años porvenir, son las siguientes:

a. La relación primas a PIB, que en la década pasó de 1.16% a 1.92%, puede verse inicialmente afectada por la disminución de algunas tasas de prima comercial, como consecuencia de la liberación de productos y tarifas, aun cuando es previsible que los asegurados adquieran un mayor volumen de seguros, por un lado, y que otras coberturas se eleven de precio en razón de que, hoy por hoy, están trabajándose a pérdida, al amparo de la compensación que han venido recibiendo de otros ramos y de las rigideces que han caracterizado a las modificaciones de los precios de parte de la entidad de vigilancia y control.
Es factible esperar, entonces, que el mercado libre, bajo la presión de la competencia, busque niveles reales a precio Para cada seguro.

b. Dados los controles que ejercerá la Superintendencia Bancaria sobre las primas puras de riesgo, es decir, sobre aquella porción de la prima comercial que se dedica al pago de siniestros, la competencia se fundará principalmente en los márgenes de gastos generales, costos de operación y comisiones de intermediación, a más de los servicios para el asegurado.

c. Sobre estos supuestos, si el crecimiento del PIB semantiene por encima del 3.5% anual, las exportaciones industriales crecen, el parque automotor sigue incrementándose al 5% promedio al año y la construcción se recupera como sector, la relación Primas PIB podría alcanzar el 2% entre 1992 y 1993.

d. Los gastos generales, los costos de operación y las comisiones pueden disminuir de manera importante, como consecuencia de un esfuerzo gerencial signado por la austeridad y orientado severamente a lograr el aumento de la productividad.
Estos dos aspectos servirán, en parte, para compensar la rebaja de primas que podria darse en la primera etapa del proceso de liberalización que nos ocupa. Otro tanto ocurrirá en las empresas de intermediación corredores y agenciasque tendrán que afirmar su gestión administrativa en esa materia.

e. Esa misma línea de conducta habra de seguirse en la administración de siniestros, mediante fòrmulas tales como la importacióndirecta de repuestos, la instalación de servicios propios de atención a personas, el montaje de talleres, etc., para disminuir costos y prestar menos servicio a los clientes.
Es decir, a los asegurados.

f. La colocación de los incrementos de la inversión forzosa en papeles con mayor rentabilidad que los Bonos de Vivienda Popular del ICT llevará a que el producto financiero se incremente paulatinamente, arrojando así un mejor balance entre la operación de seguros y dicho producido financiero.

g. Nuestra visión en tomo al futuro del sector asegurador del pais está ligada a la respuesta que dé la economia nacional a los programas de apertura, en materia de crecimiento y de modernización, la cual significaria a la actividad más primas, menor información para la gestión de mercado y una posibilidad viable de tecnificarse intemamente para lograr un aumento de su propia productividad.

h. Es previsible que haya presencia de capital extranjero adicional en las compañias de seguros, bien como aumento de capital de las ya establecidas en el pais o bien mediante el arribo de nuevas compañias foráneas. Este fenómeno se dará también en el sector de la intermediación del seguro directo, el corretaje de seguros, el ajuste de siniestros y las otras áreas de apoyo que existen en la actividad aseguradora.

i. El proceso de ajuste a las nuevas reglas de juego, dadas las premisas anteriores, permitirá ofrecer mayor variedad de productos, disponer de un mercado más ágil y económico y aumentar tanto la cobertura de los amparos como el valor asegurado y el numero de personas protegidas.

En consecuencia, y a más largo plazo, es previsible que los aseguradores aumenten sú cobertura, lo cual generará más primas, para corregir fenómenos de infraseguro o de exposiciones a pérdidas, hoy por hoy no cubiertos, como sucede en muchos pasos de lucro cesante y del riesgo de incendio.

Las nuevas medidas sobre margen de solvencia, debido al crecimiento natural de las primas emitidas, exigirán cada vez un mayor patrimonio tecnico, por lo cual, es previsible que algunas compañias tengan que destinar parte de sus utilidades a este proceso, para no tener que solicitar a sus accionistas recursos nuevos.
Sea cual fuere el origen de los fondos adicionales, éstos se dirigirán a inversiones financieras y a acciones de empresas del sector real de la economìa, con sus consecuentes beneficios para el desarrollo del paìs.