Especiales Semana

TURISMO Y VACACIONES

21 de noviembre de 1994

LA MAGIA DEL CARIBE
Lugares paradisiacos llenos de color, y armonía se encuentran todo lo largo y ancho del globo terráqueo, uno de ellos ubicado en el Caribe es la isla San Martín, pequeña pero hermosa por su vegetación.
A PESAR DE SUS 60 kilómetros cuadrados y de estar catalogada como la antilla de menor tamaño, esta pequeña isla está dividida para Francia y para Holanda. Se podría pensar que debido a su división ninguna persona puede traspasarla completamente, pero no es así, es posible pasar de un lado a otro sin que esto llegue a producir algún problema de frontera pues no en vano la llaman 'La isla amistosa'.
Su nombre se deriva de la forma razonable como tanto los franceces como los holandeses pusieron fin a las arduas batallas y se repartieron 35 kilómetros cuadrados para Francia y los 25 restantes para Holanda.
Es increíble que al poseer tan pequeño tamaño cuente con 37 playas relativamente pequeñas pero a la vez muy atractivas por sus áreas para el deporte y el descanso, también por sus arrecifes llenos de vida marina.
En ellas se puede practicar desde el buceo hasta el snorkeling, pasando por el windsurf, el esquí y el surfing y por otro lado y tal vez uno de los más interesantes para aquellos que han dejado atrás los prejuicios, son las playas nudistas ideales para que los rayos del sol toquen cada parte de la piel y le den un color bronceado extraordinario para lucir en este verano. Y además estas playas poseen una variada reserva submarina.
No se puede dejar de lado la alimentación; sería como hablar de las playas sin nombrar el mar, es por ello que la gastronomía ocupa un lugar de preferencia para los turistas que visitan año tras año la isla.
Su gastronomía es tan variada como su lengua, ofrece los más exquisitos platos de la comida francesa hasta los más sencillos de la holandesa. Sus restaurantes brindan especialidades en comida exótica, fina y tradicional para todos los paladares.
La mayoría de sus islas poseen aguas cristalinas muy tranquilas y adornadas con formaciones de coral, ideales para nadar, flotar, bucear y obtener un color de verano.
Para disfrutar de las noches románticas junto a su pareja, lo mejor es la parte francesa en donde los bares muestran todo su esplendor nocturno con su música suave y característica, así mismo los casinos y los paseos en yate son mucho más que recomendados para pasarla muy bien en esta temporada de vacaciones.
Y si por el contrario lo que se quiere es mucho más diversión, movimiento y gran rumba, las discotecas holandesas no se quedan nada cortas a las norteamericanas.
El deseo de conocer sitios lejanos llenos de color y vida es la mayor añoranza de muchos, y lugares con estas características son los que abundan a través de todo el mundo, y están a la espera de una gran visita. -