Especiales Semana

Un auge concreto

Los vientos a favor de la construcción en el país mejoraron los resultados de las compañías cementeras, siderúrgicas y fabricantes de cerámica y porcelana.

25 de abril de 2004

Las compañías que más contribuyeron al incremento de las ventas conjuntas de las 100 empresas más grandes de Colombia fueron las del sector de la construcción -cuyo PIB creció 11 por ciento- y las industrias relacionadas con éste, como cementeras, siderúrgicas y fabricantes de cerámica y porcelana (tejas, ladrillos, lozas y sanitarios, entre otros).

El buen momento por el que atraviesa la actividad edificadora en todo el país, especialmente la de vivienda de estratos altos y centros comerciales, contribuyó a que por segundo año consecutivo las cementeras tuvieran un crecimiento positivo. El consumo de cemento en el país aumentó 6,2 por ciento el año pasado, hasta alcanzar un volumen de 5,4 millones de toneladas. El aumento hubiera podido ser mucho mayor si las obras civiles no hubieran caído. Mientras que la construcción de edificaciones creció 19 por ciento en 2003, la de obras civiles apenas creció 2,5 por ciento, cuando en 2002 lo había hecho 15 por ciento.

El Grupo Argos, que participa con la mitad de las ventas nacionales de cemento, obtuvo los mayores ingresos operacionales del sector, con 1,2 billones de pesos. El mayor conglomerado cementero del país, con ocho empresas asociadas, aumentó sus ventas 20 por ciento y mejoró su utilidad operacional 10 por ciento, gracias a un estricto control de costos y gastos que le permitió mejorar su productividad. De hecho, los costos de producción de Argos bajaron 11 por ciento debido a la mayor eficiencia lograda en cada planta y a la mejoría en los procesos logísticos. Las exportaciones también han sido importantes para las cementeras, especialmente para las de Argos, que el año pasado facturó alrededor de 200 millones de dólares en ventas al exterior.

Cemex Colombia, por su parte, reportó ventas por 603.000 millones de pesos, un aumento del 11 por ciento frente a 2002. No obstante, la multinacional mexicana -segunda en la industria nacional con el 35 por ciento del mercado local de cemento y más del 50 por ciento en concreto-, presentó una fuerte caída en sus utilidades netas del 42 por ciento.

El repunte de la construcción se reflejó también en los resultados de los fabricantes de cerámica. Colcerámica, por ejemplo, registró un aumento en sus ingresos operacionales del 18 por ciento y su utilidad final creció 12 por ciento.

Otras empresas que se han beneficiado de la construcción de vivienda han sido las siderúrgicas. Es el caso del Grupo Siderúrgico Diaco, el primer productor de acero en el país, que el año pasado aumentó sus ventas 36,7 por ciento y sus utilidades operacionales 248 por ciento. Diaco, que surgió de la fusión de varias siderúrgicas colombianas como Simesa, y las siderúrgicas de Boyacá y del Caribe, pasó de tener pérdidas netas por más de 93.000 millones de pesos en 2002 a tener utilidades finales por 17.000 millones de pesos en 2003.

Acerías Paz del Río también registró un fuerte repunte en sus ventas, que subieron 36 por ciento. Luego de arrojar pérdidas por 13.000 millones de pesos en 2002, la siderúrgica boyacense obtuvo ganancias por 40.000 millones de pesos el año pasado. Para este año la compañía planea implementar el proceso de reconversión industrial aprobado por sus acreedores, el gobierno y sus empleados a finales de 2003 -que aceptaron congelar temporalmente sus salarios y ceder parte de sus prestaciones extralegales- en el marco del acuerdo de reestructuración bajo Ley 550. Con este propósito, la compañía invertirá 30 millones de dólares hasta 2007, con la expectativa de aumentar los volúmenes de producción y reducir los costos de producción.

El principal temor que asalta a los industriales del acero en el país es el alza en los precios de la chatarra, uno de sus principales insumos. En los últimos cinco meses el precio de la chatarra nacional ha subido 34 por ciento en pesos, el doble de lo que han aumentado los productos finales de hierro que han crecido 18 por ciento. La razón: el incontenible aumento de la demanda de hierro y acero en China que ha disparado los precios internacionales de estos materiales y ha empezado a afectar los precios nacionales.

La chatarra es vital para la siderurgia colombiana, porque es el principal insumo de las cuatro empresas (Diaco, Acerías de Caldas -Acasa-, Sidoc y Acerías Sogamoso) que producen el 70 por ciento del hierro nacional. Incluso Acerías Paz del Río, la única siderúrgica que utiliza mineral de hierro en sus procesos, comenzó a demandar algunas cantidades de chatarra desde hace varios meses.

El futuro

Los pronósticos del gobierno aseguran que la actividad edificadora tendrá un crecimiento de 11 por ciento en términos reales durante 2004, una cifra casi tres veces mayor que la del resto de la economía. Las razones de esa dinámica son una combinación de mejores expectativas, una demanda represada y facilidades de crédito con tasas de interés en niveles moderados. La gran duda, por supuesto, es si tras este ciclo de espectacular recuperación vendría uno de caída como el de finales de los años 90.

Si bien hay quienes señalan que se ha estrechado el campo para la construcción de vivienda de estratos altos, lo cierto es que todavía hay bastante demanda por suplir, a juzgar por la cantidad de cuentas AFC que se han abierto en los últimos años. Hoy existen 21.000 cuentas que suman más de 35.000 millones de pesos en ahorros destinados exclusivamente a la compra de vivienda.

Los constructores esperan que en 2004 la vivienda de estratos altos continúe disparada, al igual que la edificación de centros comerciales. Este tipo de edificaciones creció 95 por ciento en el último año, tras una década de muy pocos proyectos. En la actualidad hay más de 30 proyectos en curso, con inversiones superiores a 1,4 billones de pesos.

Aunque no suele haber firmas constructoras entre las 100 empresas que más venden en el país, el mejor comportamiento de la construcción se traduce en aumentos en las ventas de las industrias relacionadas, como las cementeras, siderúrgicas, manufacturas de barro y loza, fabricantes de cerámica y hasta empresarios de muebles y madera. Por eso su importancia en el análisis sectorial de las 100.