Especiales Semana

VEHICULOS

25 de abril de 1994

El conocido desconocido
CONOCER UN AUTOMOVIL A FONDO muchas veces es tarea de expertos. Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones se aprende por referencia de otros que se encargan de referirle al aprendiz su experiencia personal y las innumerables ocasiones en que por uno u otro motivo han tenido que recurrir a la intuición, al menos mientras llega la grúa.
Una de las partes mas deconocidas del automóvil o a la que menos se le hace referencia, es a los rines. El asunto es aún más desconocido cuando se trata de carga pesada. Casi siempre, la mayoría de los rines constan de varias piezas de acero troquelado soldadas unas con otras. Así también la variedad no se queda atrás. Existen los de rayos, los de una sola pieza forjada en lámina de acero, que son los convencionales y los construidos a partir de aleaciones de aluminio.
Cuando se trata de transporte de carga pesada las cosas cambian y la resistencia es ante todo el precedente, por eso se usa el famoso rin artillero que está compuesto de dos piezas: la base, que también es llamado el rin, y el aro o anillo. La vida útil de un rin depende definitivamente del trato y del uso que se le dé. Por ejemplo, el sobrepeso y los caminos en mal estado son sus principales enemigos.

El secreto del montaje
El montaje ó manejo de los rines de carga pesada es un trabajo que requiere de un cuidado especial, ya que una falla o un descuido podría ser la causa de un accidente. Actualmente el 70 por ciento de ellos ocurren mientras se efectúa el monte o desmonte de las llantas. No es para nada normal que falle o se suelte el anillo con la llanta inflada, es decir, que se produzca una explosión. Esta falla tan común generalmente ocurre en tractomulas, camiones, trailers y buses. Es por esto que algunas de las recomendaciones más importantes incluyen premisas prioritarias a la hora de hacerlo. Por ejemplo: se debe desinflar totalmente la llanta del ensamble antes de bajar el conjunto del vehículo. Así también es ideal limpiar e inspeccionar todas las partes antes de intentar realizar el ensamble. A la hora de inflar una llanta, se debe usar una válvula con activación y manómetros remotos. La persona que realice este tipo de operaciones debe mantenerse alejada y estar siempre alerta a la dirección en que se supone saldrán el aro y la base. Si el ensamble falla, lo más seguro es que ocurra una explosión.
Y así como hay puntos que siempre hay que tener en cuenta, también hay otros que jamás se deben hacer. Por ejemplo, nunca adicionar aire a una llanta que se encuentre baja de presión. En este caso úsese el repuesto, ya que para bajar el ensamble del vehículo la llanta debe estar totalmente desinflada. Otro punto es no mezclar la base y el aro de diferente tipo o dimensión. Así como tampoco mezclar las dimensiones de la llanta y del rin.
Estas son sólo algunas de las recomendaciones que todo buen conductor debe tener en cuenta tanto para vehículos corrientes como para otros de mayores dimensiones. La idea es mantener en buen estado el automóvil, sin obviar los conocimientos correspondientes.