Los consejos de las hijas de Bush a las de Obama para su salida de la Casa Blanca

Las hijas mellizas del expresidente Bush, Barbara y Jenna, dirigieron una misiva a Malia y Sasha, las hijas del saliente presidente de Estados Unidos Barack Obama.  

Barbara Bush, CEO de Global Health Corps y Jenna, corresponsal de ‘Today Show’, recordaron el frío día de noviembre, hace ocho años, cuando les dieron la bienvenida a la Casa Blanca a las Obama.

“Vimos la luz y la cautela en sus ojos mientras contemplaban su nuevo hogar. Dejamos nuestros trabajos en Baltimore y Nueva York y viajamos a Washington para mostrarles el lugar. El Dormitorio Lincoln y las habitaciones que antes eran nuestras. Les presentamos a toda la gente -la florista, los jardineros y los mayordomos- que se dedican a hacer de esta casa histórica un hogar”, se lee al arranque de la carta publicada en Time.

Las hijas Bush hicieron un recuento de lo que Malia y Sasha han hecho en los ocho años de gobierno de su padre. “Estuvieron en las puertas de la celda de Robben Island, donde Nelson Mandela estuvo encarcelado durante décadas. Viajaron a Liberia y Marruecos con tu madre para hablar con las chicas sobre la importancia de la educación. Asistieron a cenas de estado, caminaron en parques nacionales, se reunieron con líderes internacionales y se las arreglaron para reírse de las bromas de su padre durante el perdón anual del pavo de acción de gracias. Las hemos hemos visto crecer de niñas a impresionantes mujeres jóvenes con gracia y facilidad”.

En cuanto a consejos puntuales, Barbara y Jenna recomiendan a las niñas Obama “tomar  todo lo que han visto, a las personas que han conocido y las lecciones que aprendieron y dejar que todo eso las ayude y las guíe para lograr cambios positivos. Estamos seguras de que así lo harán".

También les encomendaron no olvidarse del cuerpo de escoltas del Servicio Secreto. “Nos mantenemos en contacto con nuestro Servicio Secreto. Fueron parte de nuestro crecimiento: estuvieron en nuestras primeras citas, nuestros compromisos e incluso en la luna de miel. Sabemos que no siempre fue fácil: ustedes dos y nosotras éramos adolescentes seguidas por hombres en mochilas, pero ellos pusieron sus vidas para protegernos”.

“Sus padres, que las pusieron primero y que no sólo les mostraron, sino que les dieron las vida, como siempre, estarán arraigando para ustedes el próximo capítulo que empieza. Y nosotras también”, termina la misiva.