DE ARMAS TOMAR

La familia del general Rosso José Serrano es un ejemplo tangible de que la vida está llena de contrastes. Mientras el comandante de la Policía aparece a diario en los medios de comunicación hablando de algún tema de orden público, luciendo su impecable uniforme verde con charreteras y condecoraciones, su hijo Franz lo hace con el torso desnudo y en medio de desfiles, reinados y discotecas. Las diferencias entre padre e hijo saltaron a la vista desde el principio. La primera vez que Franz apareció en escena, hace dos años, lo hizo en medio del ruido y el escándalo que generó su noviazgo con una de las candidatas al reinado de la belleza. En ese entonces su padre guardaba el mayor sigilo para seguirle la pista al cartel de Cali.
Las comparaciones no se hicieron esperar y la curiosidad que generaron estos dos mundos tan distintos, pero tan cercanos, fue enorme. Sin embargo muchos pensaron que se trataba de un incidente de jovencito bullicioso y descarriado que se calmaría después de que el general lo llamara a calificar servicios. Y aunque se mantuvo alejado de la prensa por un tiempo después de participar en septiembre pasado en el concurso Míster Mundo, ahora ha vuelto a la escena nacional demostrando, para sorpresa de todos, que tiene aspiraciones tan serias y altas como las del general. Durante estos meses Franz ha estado concentrado en su residencia de Miami, preparándose para asumir una nueva etapa en su vida: ser cantante y consolidarse en las pasarelas de Europa e Israel como el máximo representante del hombre sexy latino. Para lograrlo está estudiando técnica vocal, coreografía y a diario desarrolla una rutina de ejercicios físicos para cultivar su cuerpo.
La voz cantante
Su carrera como cantante no es invento nuevo. Desde pequeño Franz ha vivido fascinado con la idea de estar "arribita de los demás" en un escenario y concentrando en él las miradas de un auditorio. Cuando tenía 14 años vio un reinado de belleza y soñó con la posibilidad de concursar en un evento similar para el sexo masculino. "Yo me preguntaba por qué no hacen concursos para hombres. Cuando me enteré de Míster Mundo pensé que se lo habían inventado para mí". Pero además del modelaje, también lo seducía la idea de ser cantante. "Yo he sido el artista de la familia y siempre canté en grupos muy cerrados", afirma Franz. La oportunidad de incursionar en este campo solo llegó hace unos meses, cuando su manager Isabel Santori le propuso que hiciera una prueba de audio para el productor musical italiano Olimpio, el mismo de artistas como Emmanuel y Amy Stewart. A finales de mayo viajó a Roma a una entrevista con este experto en hacer cantantes y después de cuatro horas de interrogatorio Olimpio le dijo: "Me siento honrado de que trabajes conmigo".
El proyecto musical consiste en un disco con una mezcla de sonidos latinos, nueva era y balada, cuyos temas serán ecológicos y se grabará con la tecnología italiana pero con el soporte musical de colombianos. Como ya sabe que la buena imagen que su padre tiene en el mundo como héroe de la lucha contra el narcotráfico le abre puertas en cualquier lugar, decidió embarcarse en este reto. "Si el hijo de Julio Iglesias se lanzó como cantante, el hijo del general Serrano también puede hacerlo", dice Franz. Pero en medio de ese proyecto tiene una oferta de modelaje que él considera tan importante como su participación en el concurso Míster Mundo. Se trata de una invitación para asistir a un programa en vivo en Israel del corte de los talk shows, donde han aparecido superestrellas de talla mundial como Madonna. En este programa Franz será presentado como el top model latino. "Todas estas propuestas son puertas que se abren con el concurso Mr. World. En Europa ser Míster Colombia es muy importante".
Un hijo modelo
Es común que los hijos de los médicos quieran estudiar medicina y que los hijos de los periodistas se quieran convertir en periodistas. Pero la excepción a esta regla de oro es sin duda este personaje. "A mí nunca me interesó ser policía porque a mí nadie me manda". Por el contrario, conociendo su aguda capacidad para negociar, el general y su esposa siempre pensaron que Franz se inclinaría por una carrera como administración de empresas. Pero aunque lo de ser policía estuvo descartado desde el principio, a sus padres Franz siempre les salió general. El primer gran golpe que les asestó fue cuando dejó a un lado su carrera de publicista y les informó que quería ser modelo de pasarela. Fue entonces cuando el general tuvo que admitir que su hijo era muy difícil de controlar. Sin embargo hoy las cosas han cambiado. El modelo cuenta que aunque se preocupan por sus actividades, sus padres ya han perdido la capacidad de asombro con él. Cuando llama por teléfono el general pasa por encima los saludos formales y con voz resignada va directo al grano: "Mijo y ahora en qué anda". Y aunque a veces se le escapa un "está completamente loco", Franz sabe que cuenta con su apoyo incondicional.
Parte del cambio se debe a que Franz tomó la decisión de demostrar que no era el jovencito escandaloso del reinado sino un artista integral que podía mantenerse por sí mismo y que contaba con suficientes capacidades para triunfar. En el momento, este modelo colombiano se siente orgulloso de sus logros porque, a diferencia de muchos, el sí ha concretado sus sueños. "He logrado lo que ningún modelo colombiano ha hecho, no como el tipo más lindo sino como el que mejor se sabe vender".