Home

Gente

Artículo

De género dudoso

22 de agosto de 2009

Mientras en Sudáfrica la llaman la ‘chica de oro’, en otras partes del mundo ponen en duda que sea eso, “una chica”. Caster Semenya se robó el show del Mundial de Atletismo de Berlín no sólo por ganar la medalla de oro en la prueba de 800 metros, sino por su aspecto físico. Su musculatura, la estructura de su cuerpo, el vello facial, su voz grave y su rostro masculino despertaron dudas sobre si la mujer de 18 años era más bien hombre o hermafrodita. Según su familia, la atleta fue humillada por las especulaciones acerca de su género. “Es mi niña, yo la crié. Ahora los sudafricanos tienen a alguien de quien pueden sentirse orgullosos, pero los detractores buscan historias donde no las hay”, dijo su padre.
 
Hasta la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo le practicó exámenes para cerciorarse de que es mujer, y Pierre Weiss, secretario general de la institución, dijo que si las pruebas científicas demostraban que no era así, le quitarían la medalla. El propio entrenador de Semenya confesó que una vez que la joven fue al baño de damas en una estación de gasolina, uno de los empleados le dijo que se había equivocado, a lo que ella respondió que podía bajarse los pantalones para demostrarle que era mujer.
 
Los controles de sexo fueron populares desde finales de los 60 a los 80, especialmente por el aspecto de las atletas de la República Democrática Alemana, muchas de las cuales lucían hombrunas por el uso de testosterona. Pero dejaron de ser obligatorios en 2000. La primera atleta que no pasó el test fue la polaca Ewa Klobukowska, en 1967, y en 2006 la corredora india Santhi Soundarajan también lo perdió, al parecer por un desorden genético, por lo cual le retiraron una medalla de plata. Con el triunfo de Semenya las primeras en poner en duda su género fueron algunas de sus contrincantes. “Para mí es un hombre”, dijo Elisa Cusma, quien quedó sexta. “Sólo mírenla”, se quejó Mariya Savinova, quien llegó de quinta a la meta.