Home

Gente

Artículo

Diario de un príncipe

El primer ministro británico Tony Blair debe estar molesto con el príncipe Carlos de Inglaterra.

26 de febrero de 2006

Pese a que cada vez que coinciden en un lugar hay sonrisas y apretones de mano, podría haber descubierto que no le cae bien al heredero al trono. Por estos días, varios periódicos de Londres han publicado fragmentos del diario de Carlos en los que se queja de los políticos que, como Blair ", se guían por sondeos de opinión" y que basan sus decisiones en "documentos preparados por asesores que no tienen experiencia de aquello sobre lo que han de decidir". Parte de los textos fueron escritos con motivo de la devolución de Hong Kong a China en 1997. El príncipe describe a los diplomáticos chinos como "horribles" y del viaje a la entonces colonia británica cuenta que su asiento en clase preferente en un Boeing 747 era "bastante incómodo" y que su sorpresa fue enorme cuando se percató de que otros dirigentes volaban en primera. "Es el fin del Imperio', me dije suspirando", escribió. Sus abogados han acudido a los tribunales para tratar de detener la publicación alegando que el diario fue robado por un ex sirviente de Carlos, y que se trata de violación a la intimidad y a los derechos de autor.