El trauma de Nadal
Parece que además de problemas físicos, el tenista Rafael Nadal tiene problemas emocionales. La tendinitis de sus rodillas no sería la única responsable de los recientes problemas del número uno en las canchas y de que renunciara a Wimbledon. Según Neil Harman, corresponsal del diario británico The Times, el español está sufriendo mucho debido a que se separaron sus padres, Sebastián Nadal y Ana María Parera. "Nadal nunca lo mencionó, jugó y esperó. Habló sobre reprogramar su cuerpo después de retirarse del campeonato por problemas de rodilla, pero ahora debe centrarse en un tema más difícil: volver a encauzar su vida", escribió Harman, quien en su artículo se refiere a la posibilidad de que Nadal pierda el primer lugar en el escalafón mundial. Esta crisis emocional se debe a que el joven de 23 años siempre ha sido muy familiar: su tío Toni Nadal es su entrenador y hace un año, cuando ganó Wimbledon por primera vez, se unió en un emotivo abrazo con sus papás frente a todo el público. "Imaginen lo que ha debido ser tratar de hacer tu deber por ti mismo, por tu equipo, por tu profesión, y teniendo que rendir, cuando tu corazón está en otro lado", reflexiona el periodista.