Esa platica se perdió

Se trata del boxeador Mike Tyson, de 37 años, quien anunció su situación ante la corte de Manhattan. Todo el mundo sabe que el pugilista no se ha destacado por su buen comportamiento y va de juicio tras juicio. Pero aún así es difícil imaginar en qué se gastó ese dineral. La respuesta aparece en el documento que presentó para demostrar su situación: se gastaba 400.000 dólares al mes para mantenerse. De 1995 a 1997 gastó 230.000 en servicios de bepers y celulares. Una fiesta de cumpleaños le costó 410.000 dólares. Mantener a los tigres que tiene por mascotas le suponía 8.100 dólares y en limosinas 65.000. En una joyería de Las Vegas compró una cadena de oro con diamantes de 173.706 dólares. En otra joyería les compró a un grupo de amigos 500.000 dólares en joyas. El divorcio de Mónica Turner le costó nueve millones de dólares, así como otros gastos legales. Pese a sus excesos el boxeador asegura que el principal culpable de su desgracia es su propio promotor, Don King, quien según él lo ha engañado. Por ello lo demandó por 100 millones de dólares, esperando obtener ese dinero para recuperar su situación.