A EUROPA CON PONCHO

EN SUS ULTIMAS columnas Poncho Rentería no ha parado de contar las delicias del reciente viaje que hizo a Europa en compañía de cinco amigas. El periodista, que siempre anda rodeado de mujeres, parece ser el hombre que mejor entiende la sicología femenina. "Ellas congenian conmigo -dice- porque tengo un buen coctel de frivolidad, simpatía e inteligencia. Soy anarquista pero sé poner orden. Soy confidente y ligeramente demente, así que les entiendo los rollos de sus angustias. Si todo eso se mete en una licuadora, da un tipo que se acomoda muy fácil al mundo femenino". Sólo así se explica que en uno de sus habituales almuerzos, sus cinco amigas le hayan propuesto hacer un tour de 20 días en su compañía.
A los 30 días estaban tomando avión Poncho y su novia Lula Arango, Margarita de Peláez, María Carreño, la Nena Villa y Carla Sigismundo. Fueron a París, Venecia y Madrid. "Lo que queríamos era pasear por ciudades habitables y estar bastante tiempo en cada una para distrutarla sin trotes y en un clima de como-se-nos-dé-la-gana, para gozar de esa cosa que se llama libertad. Nos fue maravilloso", dijo el columnista a SEMANA.
Esta experiencia -que él califica de "fascinante"- le enseñó que las mujeres son excelentes compañeras de viaje. "He optado por la compañía femenina más que la masculina porque los hombres hablan mucho de política y son cansones por vanidosos y soberbios. En cambio las mujeres tienen vida y sensibilidad. Eso quiere decir neuras, rabias, indignaciones, pero también humor, picardía y erotismo". Y la fórmula de viajar en grupo garantiza el éxito: "Yo no hago de guía porque no manejo Europa ni idiomas. Pero una sombra masculina en un grupo femenino viene bien porque equilibra el grupo con la ventaja de que no soy amante ni marido y ya parece que soy un señor inofensivo".
En todo caso, las crónicas sobre el viaje han desembocado en que el tour de Poncho por Europa va a convertirse en una institución anual. Además de las compañeras de este año, quienes piensan repetir, muchas mujeres con medios económicos y sin compañía están entusiasmadas con la fórmula de viajar en pandilla con un parejo colectivo y han empezado a reservar cupos. Una agencia de turismo que se enteró del proyecto está contemplando la idea de elaborar un paquete que le saldría a un costo razonable a las viajeras y, por supuesto, gratis a Poncho. La meta sin embargo es que el número total de viajeras no pase de 12. Todo parece indicar que así como hace algunos años las quinceañeras de buena familia conocían Europa con doña Ana Restrepo del Corral, ahora las mujeres cuarentonas lo podrán hacer con Poncho.-