“No le deseo a Colombia la reelección”: Vargas Llosa

Si el presidente Álvaro Uribe se lanza a una segunda reelección, el balance de su gestión se va a ver perjudicado. Lo mismo ocurrirá si se reforma la Constitución para permitir un tercer mandato presidencial. Así lo dijo esta mañana el célebre escritor peruano Mario Vargas Llosa en una entrevista desde el Hay Festival en Cartagena con RCN Radio.

“Yo creo que Uribe ha sido un magnífico presidente; que, haciendo las sumas y las restas, su gobierno va a quedar como uno de los grandes de la historia de Colombia, y creo que afearía ese récord extraordinario si se presentara nuevamente a la reelección”, declaró Vargas Llosa, de 73 años.

El autor de novelas como ´La casa verde´ y ´La Fiesta del Chivo´ señaló que no desea para Colombia esa segunda reelección. “No se lo deseo al país porque estoy convencido de que cuenta con suficientes líderes que pueden hacer retroceder el narcoterrorismo y tomar buenas medidas económicas”.

Vargas Llosa, que a lo largo de su vida ha sido galardonado con el Premio Rómulo Gallegos, el Premio Cervantes y el Premio Príncipe de Asturias de las Letras, añadió que no cree que “un presidente en ejercicio pueda cambiar las reglas del juego en provecho de sí mismo sin deteriorar la democracia”.

Según el autor de ´La guerra del fin del mundo´, sería injusto meter en el mismo saco a un gobierno como el del brasileño Luiz Inácio ‘Lula´da Silva junto con el del presidente venezolano Hugo Chávez. “En América Latina hay gobiernos democráticos y otros que no lo son. Entre los primeros los hay de derecha y de izquierda”, señaló.

Para Vargas Llosa, “Venezuela no es hoy en día una democracia. Se persigue a los disidentes, se ordena el cierre de las emisoras de radio y hay una matonería contra la oposición. Eso es lo que el comandante Chávez llama el socialismo del siglo XXI, que es la dictadura de siempre, la que tantos males le ha traído a América Latina”, dijo.

El escritor peruano no descartó que el final de Chávez se produzca mediante un golpe militar. “La devaluación golpea a los trabajadores y el cierre de los órganos de comunicación independientes hará que la oposición crezca. No sería raro que por descomposición interna haya un golpe. Pero, si eso ocurre, ojalá sea de una forma más bien pacífica”, concluyó.