Home

Gente

Artículo

PSICOSIS

La muerte del actor Anthony Perkins estremece a Hollywood: el sida ataca de nuevo.

19 de octubre de 1992

DESDE QUE EL sida hizo su aparición en escena ha sido percibido como un fantasma sinuoso que termina medido en alarmantes estadísticas anónimas. Pero, cada tanto, sale del anonimato tocando a una figura pública que se convierte en la personificación viviente de una amenaza latente. Uno delos primeros golpes que sufrió Hollywood por cuenta suya fue Rock Hudson. Después de una larga carrerra de galán con la que había contribuido a crecer el mito del gran "macho americano", Hudson dejó atónita a su audiencia poco antes de morir de sida, al sacar a la luz pública su vida privada que incluía homosexualismo. Casos como el del basquetbolista Magic Johnson o el tenista Arthur Ashe contagiados con la enfermedad han engrosado en este año la lista de personalidades que cayeron en esa ruleta rusa.
La semana pasada el sida puso de nuevo luz sobre Hollywood y su mundo al cobrar otra víctima en su "Hall de la Fama". Esta vez se trata de Anthony Perkins, de 60 años, el actor que representando a Norman Bates en la película "Psicosis", le dio una nueva y terrorífica dimensión al común hábito de tomar una ducha. La trágica historia de su enfermedad y de la manera en que se enteró de que la padecía, habría podido formar parte del guión de "Psicosis".
A pesar de que el pánico cundió en Hollywood cuando sus habitantes tomaron conciencia de que el sida había llegado para quedarse.
Anthony Perkins no se unió a las hordas que corrieron a hacerse un test. Pero un día, sentado en el sofá de su casa viendo el periódico The Esquire, leyó un artículo que incluía una lista de personas afectadas con el mal y a la altura de la "P" estaba completo su nombre. Convencido de que se trataba de una equivocación, pero algo preocupado, Perkins averiguó de qué se trataba y a medida que avanzaba en sus pesquisas su sicosis aumentó. Resultó ser que algunos meses atrás el actor se había tomado en Los Angeles varias muestras de sangre para un examen que buscaba detectar las causas de un permanente temblor en sus mejillas. Algún laboratorista acucioso tomó las muestras y les hizo un test de sida, el cual resultó positivo. Ese resultado y el de otros casos terminó en manos de un periodista de The Esquire. Aún incrédulo, pero ya bastante alarmado, Perkins decidió hace dos años someterse al test que vino a comprobar lo que ya había publicado el diario.
La noticia resultó devastadora para él y su familia y vino a sumarse a una difícil época de brazos caídos que venía sufriendo el actor desde hacía varios años.
Aunque en 30 años de carrera Anthony Perkins participó en una docena de películas, su papel de Norman Bates el dueño de un motel que mantenía el cadáver de su madre en el ático de una vieja casa victoriana en la película "Psicosis", de Alfred Hitchcock lo marcó para siempre. Su viuda, Berry Berenson, hermana de la actriz Marissa Berenson, se refiere a los dos largos años que Perkins esperó a que un director lo llamara a ofrecerle un papel: "Nunca se quejaba, aprendió a tocar el piano y se sentaba cerca del teléfono esperando una llamada de su agente. Pero sabía que el fantasma de Norman Bates lo perseguía.
Cuando Perkins supo que padecía el mal, decidió inicialmente mantenerlo en secreto. Sólo su esposa y sus dos hijos Osgood de 18 años y Elvis de 16 lo sabían. Pero cuando la enfermedad empezó a minar su físico de una manera evidente y el final estaba cerca, rompió su silencio y reconoció haber tenido relaciones homosexuales.
Su historia fué la de un actor de carrera. En 1954 el director Elia Kasan estuvo a punto de elegirlo para el papel estelar de la película "East of Eden", pero terminó inclinándose por James Dean. Kazan, sin embargo, le ofreció un papel protagónico en la obra "Tea and Sympathy". La obra que estuvo 54 semanas en Brodway hizo que los ojos de los productores de Hollywood se voltearan hacia él. Algunas películas sin mayor impacto precedieron a la que lo marcaria de por vida por cuenta de Alfred Hitchcock. Aunque realizó varias películas más nunca alcanzó el éxito que obtuvo su personaje en "Psicosis". Quizá por eso intentó continuar en esa línea y entre 1983 y 1990 hizo "Psicosis" II,III y IV que tampoco le devolvieron su momento de gloria.
El 13 de septiembre pasado en su casa de Hollywood y a los 60 años, Anthony Perkins entró a engrosar la lista de figuras públicas que mueren de sida.