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Un juicio poco glamuroso

Las celebridades, desde Julia Roberts hasta Jennifer Lawrence, eligen Dolce & Gabbana para sus más importantes eventos y alfombras rojas.

3 de mayo de 2014

Las celebridades, desde Julia Roberts hasta Jennifer Lawrence, eligen Dolce & Gabbana para sus más importantes eventos y alfombras rojas. La marca italiana ha sido durante años un símbolo de elegancia, pero ahora sus fundadores, Stefano Gabbana y Domenico Dolce, están enredados en un asunto nada glamuroso. Un juez italiano los condenó a 18 meses de cárcel por evasión de impuestos, un crimen que ellos niegan rotundamente. Ya el año pasado fueron declarados culpables, pero los diseñadores apelaron la decisión. Esta vez han dicho que piensan hacer lo mismo, por lo que la condena está suspendida. La acusación viene de 2004, cuando el dúo vendió su marca a otra compañía de la que también son dueños, pero que está basada en Luxemburgo (donde los impuestos son mucho más bajos que en Italia). Ese tipo de maniobras es común entre las casas de moda, pero al ser confrontadas por la Justicia, las marcas suelen mantener el asunto fuera de las cortes. Es el caso de Armani y Prada, que pagaron 270 millones y 420 millones de euros, respectivamente, para llegar a acuerdos con las autoridades.