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TERRORISMO EN FRANCIA

Atacaron el corazón de París: los jóvenes

El horario, el día y sobre todo los sitios en los que atacaron los terroristas envían un mensaje siniestro a los progresistas europeos. Se tejen las primeras hipótesis sobre el viernes negro.

14 de noviembre de 2015

París amaneció fría y confundida. Todavía no pasa el estupor por el ataque terrorista más sangriento en la historia de Francia. Nadie, por ahora, se atreve a medir el impacto de lo ocurrido este viernes 13 de noviembre.

Barack Obama, presidente de Estados Unidos, dijo que lo ocurrido no fue un ataque a los franceses "fue un ataque contra la humanidad y los valores que nos unen".

Los cruentos ataques tienen varias señales que envían un mensaje desde se concepción hasta su ejecución. Las acciones se concentraron en el centro de París.

Específicamente en la zona donde los más jóvenes se reúnen para asistir a eventos culturales, tomar un trago o simplemente reunirse con amigos. "Es la zona de los parisinos progresistas", afirman diferentes cables de las agencias.

Zonas como Le Carillon, La Belle Equipe, Le Petit Cambodge tienen características comunes. Son suburbios de clase media. Barrios tradicionales que están medianamente lejos de las típicas zonas turísticas de París. Pero sobre todo son sitios donde los jóvenes de diferentes descendencias se reúnen, comparten y disfrutan. Son pocos los visitantes extranjeros que se acercan a estos sitios.

Además el día y la hora de los ataques deben ser considerados. El clima de otoño un viernes en la noche invitaba a la concurrencia. Era un día ideal para los jóvenes, que fueron calificados por la alcaldesa electa como "el corazón de la ciudad".

El cruento ataque terrorista contra la capital francesa fue planeado en función de asustar y de fondo de dividir.

El ataque al concierto fue la clara muestra. "Nada democratiza más que la música. Jóvenes de todo tipo se reúnen para disfrutar sin importar procedencias. Es una expresión de alegría", explicó el analista Manu Sádiaa.

Los primeros indicios apuntan a que los terroristas atacaron los valores más profundos de los franceses.

El ataque al fútbol

Aunque el Stade de France está ubicado a las afueras de París, lejos de la zona céntrica, el mensaje se puede extrapolar. La selección francesa es un símbolo de unión interracial para el país.

En el equipo galo se congregan jugadores de raíces africanas, árabes, europeas, hasta caribeñas. Similar a lo que ocurre en los suburbios que fueron atacados.

El promedio de edad de la  selección francesa de fútbol es de 26 años. Actualmente se están preparando para ser el anfitrión de la Eurocopa, donde tendrá la oportunidad de volver a vencer como lo hizo de la mano de jóvenes de ascendencia inmigrante como Zinedine Zidan, Patrick Viera o Cloud Makelele, unidos con compañeros como Fabián Barthe, Laurent Blanc o Emanuel Pettit. Una coincidencia que comienza a convertirse en una pista para los investigadores.

A la salida del estadio, en medio de la conmoción y la confusión, cientos de franceses cantaron con el pecho inflado su himno.

Entendieron, acaso, que los terroristas esta vez atacaron su corazón, sus valores y sus jóvenes por lo que tendrán que permanecer unidos para que el miedo no gane esta nueva batalla.