"DE FRENTE CON EL FRENTE"

Aunque el proceso electoral nicaraguense, iniciado el pasado 2 de agosto, no tuvo el colorido y la notoriedad que eventos semejantes desatan en algunos países latinoamericanos, ya que, según las autoridades la deteriorada economía del país y la guerra civil no lo permitieron, y a pesar de que la contienda destinada a ganar electores tampoco estuvo marcada por movilizaciones espectaculares de los partidos participantes, el acto con que el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), cerró su campaña electoral sí desbordó los cálculos de los más optimistas: cerca de 200 mil personas (algunos aseguran que fueron 100 mil más) se congregaron al grito de "seguimos de frente con el Frente" cuando avanzaba la tarde del pasado 1° de noviembre en la plaza "Héroes y Mártires Carlos Fonseca", anticipando así lo que serían los resultados electorales del 4 de noviembre.

Era un contingente de personas --la mayoría jóvenes de ambos sexos--, portaban banderas y coreaban consígnas mientras bajaban por la avenida Bolívar inundando como potente mareada la plaza. Daniel Ortega, antiguo guerrillero de 39 años y primer Comandante de la Revolución, hizo el discurso central, en su calidad de aspirante a la presidencia de la república. En su habitual traje verde oliva y con el adusto rostro que le caracteriza el líder sandinista atacó a la administración del Ronald Reagan y advirtió que la incursión de un sofisticado avión supersónico norteamericano el día anterior sobre Managua presagiaba "mayores acciones de gran envergadura", y que el Presidente estadounidense aprovechará su probable victoria electoral del 6 de noviembre "para lanzarse sobre Nicaragua" con apoyo indirecto de "internacionales como la liberal y la social cristiana". Por tanto, concluyó, la tarea más urgente es votar por el FSLN, maximizar la producción y apresurar los preparativos para la defensa militar de Managua y de todas las ciudades, para que Estados Unidos "lo piense dos veces" antes de intervenir. La casi totalidad de los 9 comandantes más altos del sandinismo y Sergio Ramírez, el escritor y abogado de 42 años, miembro de la Junta de Gobierno y quien fuera el candidato del FSLN a la Vice presidencia, acompañaron a Ortega en la tribuna.

Para la oposición, sin embargo, la amplia movilización no fue una genuina expresión de fervor político. Caracterizando el evento, el diario La Prensa dijo --sin que fuera censurado por eso-- que ésta había sido una reunión "de la enorme burocracia que el FSLN mantiene en Managua" y que el discurso de Ortega fue "pobre" y "amenazante", el "mismo que hemos oído en estos cinco años de gobierno".

Poco afectada en realidad por tales valoraciones, la ciudadanía nicaraguense acogió desde el comienzo las reglas del juego electoral del sandinismo, que trata así de hacer algo muy intrincado: agregarle a un proceso de por sí novedoso (por ser marxista y cristiano a la vez que trata de preservar cierto pluralismo, el no alineamiento y la economía mixta, en medio de una dinámica de guerra y de cambio social radical), el ingrediente electoral, sin caer en la manipulación. En respuesta a eso, un 1.560.588 ciudadanos se inscribieron para poder elegir Presidente, Vice presidente de la república y una Asamblea Constituyente de 90 miembros, los cuales provendrán no sólo del FSLN, sino de los Partidos Conservador Democrático (PCD), Socialista (PS), Popular Social Cristiano (PPSC), Comunista (PC) y Movimiento de Acción Popular (MAP) que son las cinco restantes fuerzas que también hacen el proceso, aunque en su calidad insuperablemente inferior al del sandinismo.

Clemente Guido, un médico de 54 años y Mercedes Rodríguez, una hacendada de 52, viuda del General Emiliano Chamorro, viejo caudillo conservador, fueron los candidatos del PCD bajo las divisas de "paz social entre las clases sociales" y "respeto a la propiedad privada". Mauricio Díaz un abogado de 34 años y Guillermo Mejía, obrero de 46 años corrieron por el PPSC, mientras que el PC lo hizo con Allan Zambrano, un dirigente sindical de 30 años y Manuel Pérez, otro dirigente obrero de 60 años. El aspirante más viejo a la presidencia, fue, no obstante, Domingo Sánchez de 69 años de la fórmula del PS, con la compañía de Adolfo Evertz, un ingeniero de 48 años empleado del ministerio de Reforma Agraria.

Poco antes de que finalizara la campaña, un sector del Partido Liberal Independiente (PLI) se retiró, lo que desató rumores en el sentido de que ello era obra de la diplomacia norteamericana, quien caracterizó siempre como una "farsa" las elecciones del 4 de noviembre. Sin embargo, el sector que lidera Constantino Pereira Bernheim, candidato a Vice presidente del PLI se mantuvo en la lucha electoral quedando virtualmente sólo Virgilio Godoy Reyes, el candidato presidencial de esa agrupación. La opositora Coordinadora Democrática Nicaraguense (CDN) --integrada por tres partidos políticos, dos centrales sindicales y dos agrupaciones de empresarios-- continua hasta el fín marginada de la contienda electoral por considerar que no existieron condiciones para jugarse en ella. No obstante, tres núcleos de la CDN decidieron participar en un nuevo experimento político inaugurado el 31 de octubre último: (el denominado Diálogo Nacional) que involucra a 29 organizaciones políticas, sindicales, económicas y religiosas, y que tienen por objeto analizar temas como la paz, la estabilidad y la economía en el país.

Este último aspecto cada día es objeto de mayor preocupación por Parte de la ciudadanía nicaraguense. En los meses más recientes se ha incrementado el desabastecimiento de ciertos bienes ante un déficit de 500 millones de dólares. Algunos voceros del gobierno explicaron a SEMANA que si bien las exportaciones (algodón y café) de éste año serán del órden de los 400 millones de dólares las importaciones ascenderán a los 900. Este balance de divisas ha afectado el suministro interno de ciertos bienes como medicinas, repuestos para transporte y maquinaria, e insumos agropecuarios. Por otra parte la deuda externa es de 4 mil millones de dólares (éste sólo año pagaron 200 millones por servicio de la misma) y la guerra que ha causado pérdidas por valor de 200 millones de dólares, así como 7 mil muertos y casi 2.900 heridos, obliga al gobierno a dedicarle un 25% de su presupuesto nacional a los esfuerzos de defensa. Pese a todo ello, al menos la ración alimenticia diaria de la población es garantizada por el gobierno mediante subsidios a productos como arroz, sal, azúcar, aceite, fríjoles, maíz y jabón, lo que convierte a un tubo de dentífrico o a una bombilla eléctrica en un lujo difícil de alcanzar para muchos.

"Farsa", para algunos, "acto soberano" para otros, estas elecciones dividieron en todo caso a los mismos "contras", quienes hicieron saber a través de Adolfo Calero, que suspenderían sus acciones durante 24 horas del domingo electoral, mientras que Pastora se negó a hacerlo. -
Eduardo Mackenzie,Enviado Especial