El hotel hitleriano

Los judios alemanes tienen motivos para estar descontentos. El 13 de julio comenzó la construcción de un ambicioso complejo turístico en Berchtesgaden, uno de los lugares que mejor simbolizan la Alemania de Adolfo Hitler. Allí el dictador construyó una casa de campo que se convirtió en una sede alternativa de gobierno. El lugar fue un nido de amor para el Führer y su amante Eva Brawn, pero también el lugar en que Hitler buscó la inspiración para escribir la segunda parte de su obra Mein Kampf. Además fue en Berchtesgaden donde se planeó la invasión de Polonia de 1939. La presión de la comunidad hebrea hizo que los directivos de la empresa se comprometieran por escrito a impedir que el sitio se convierta en un lugar de peregrinación de neonazis.