EL REENCAUCHE

Quienes creían que los norteamericanos son los ciudadanos de mundo que más ejercen su derecho al sufragio, se sorprendieron a enterarse que los franceses regresaror el domingo pasado a las urnas por novena ocasión en menos de un año Los comicios, destinados a elegir a los alcaldes de toda la nación, rompieron una tendencia vigente desde hace varios periodos, y representaron una importante victoria para el Partido Socialista del presidente Francois Mitterrand .

"Es la primera vez en largo tiempo en Francia que vemos a un gobierno en el poder, recibir semejante apoyo popular en las elecciones municipales", declaró jubiloso Pierre Joxe, ministro del Interior. El contraste con las elecciones anteriores resulta evidente. En las municipales de 1983 , con los socialistas en el poder, los conservadores hicieron importantes avances, mientras que en 1977, con estos últimos en el palacio del Elysée fueron los socialistas los que ganaron las locales en forma contundente.

En esta ocasión, los socialistas capturaron entre otros los ayuntamientos de Estrasburgo, Dunquerque, Muihouse, Avignon y Orleans, que, sumadas a las municipalidades que ya tenían, representaron un total de 78 ciudades de más de 30 mil habitantes, comparadas con las 66 que ganaron en las elecciones de hace seis años. El avance se hace más ostensible si se tiene en cuenta que los partidos de centro derecha, ganaron en 84 municipalidades, comparadas con 88 que habían logrado en 1983, si bien obtuvieron victorias de gran significado, como la de Jacques Chirac en Paris y Pierre Noir en Lyon. La tendencia que más llamó la atención a los observadores fue el alejamiento progresivo de los extremos tanto de izquierda como de derecha. A pesar de que el Frente Nacional de Jean Marie Le Pen, famoso por sus puntos de vista draconianos sobre la permanencia en el pais de inmigrantes árabes y africanos, ganó en Perpignan con un sorprendente 29%, su desempeño general no fue muy halagüeño. Los comunistas, por su parte, perdieron cinco ciudades importantes, entre ellas Amiens, donde llevaban 18 años continuos de victorias.

A pesar de todo, una fuerza política nueva y esencialmente joven hizo su aparición en Francia, pisando duro de entrada. Se trata del Partido Ecologista, que presentó guarismos sorprendentes y que, a juicio de los analistas, podría ser el desarrollo más importante y duradero del año electoral en el país galo. -