Home

Mundo

Artículo

Thelma Lazernick posa con su arma dentro del local de pizza | Foto: AP Photo/The Virginian-Pilot, Amanda Lucier

MUNDO

Estados Unidos: descuento en pizza si se muestra arma

Restaurantes ofrecen descuentos para apoyar respeto a la segunda enmienda

Juliana Jara
26 de febrero de 2013

El debate sobre el porte de armas en los Estados Unidos no deja de dividir a la población. Así como hay grupos que cabildean en el Congreso para evitar mayores restricciones al porte de armas, o abogan por mayor control de las mismas, los empresarios no se quedan atrás.

Aprovechan su posición no solamente para generar presión popular en el Congreso, sino también para promocionar sus negocios.  Es así como se ha generado una  nueva forma de organización ciudadana por fuera de la tradicional sociedad civil organizada (colectivos, ONG´s, fundaciones).

Varios dueños de restaurantes abogan por la no restricción al porte de armas. En el Estado de Virginia, se puede conseguir pizza más barata si se muestra un arma al vendedor, y en Ohio, el dueño de un local de helado de yogur fue quien tuvo la idea inicial de vender alimentos más baratos a quienes se muestran a favor del porte de armas.

El dueño de la heladería, le disminuye un dólar al precio de cada producto, mientras en la pizzería se obtiene un 15% de descuento si se lleva el arma al local, o si muestran el salvoconducto. La medida ha sido todo un éxito, pues alrededor del 80% de los clientes del local 'All around deli pizzas' ha obtenido el descuento, y sus ventas han aumentado.

Estos restaurantes que apoyan el respeto de la segunda enmienda, han visto que la clientela se ha acercado a las tiendas con sus armas. Según el dueño de la pizzería, Jay Laze, varias personas se han presentado con pistolas 9mm e incluso, una llegó con una AK-47. Afirma que se siente seguro con todas esas armas alrededor y descarta que algo malo pueda sucederle, pues “siempre estamos rodeados de armas”, le dijo a la agencia AP.

Algo similar había sucedido en julio del año pasado, cuando se hablaba del matrimonio homosexual. La cadena de sándwiches Chick-fil-A en cabeza de su dueño, organizó un día para que quienes apoyaran el matrimonio tradicional entre un hombre y una mujer, fueran a comer a sus restaurantes. La idea surgió después de que se supo que la cadena donaba dinero de sus ganancias a organizaciones que se oponen a los derechos homosexuales. 

Estos fenómenos demuestran hasta qué punto proyectos de ley polémicos politizan todas las esferas de ese país, pues algunas personas deciden no comer en esos lugares, como sucedió con Chick-Fil-A o por el contrario, deciden acudir para apoyar sus ideas políticas. Los restaurantes se han convertido en el nuevo lugar de batalla política a nivel ciudadano.