Fisuras en el Kremlin

El presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, parece estar trazando una línea entre su liberalismo y el radicalismo del primer ministro, Vladimir Putin. De cara al cumplimiento de su primer año de mandato y ante una recesión que amenaza con empeorar, el mandatario accedió a reunirse con los principales opositores del Kremlin, y habló para Nóvaya Gazeta, el más radical medio de oposición, en la primera entrevista que concede a un medio impreso desde cuando asumió la Presidencia. Algunos analistas creen que el fin de la operación en Chechenia, 10 años después del inicio de la cruzada antiterrorista en esta región separatista, tiene que ver también con este nuevo ánimo de apertura. Aunque se consideran pasos pequeños para la renovación que necesita la democracia rusa, como dicen por ahí, algo es algo.