Home

Mundo

Artículo

EUROPA

Humo blanco

21 de noviembre de 2009

La Unión Europea ya tiene su cúpula. Después de una sesión en Bruselas, los 27 países eligieron por unanimidad al primer ministro belga, Herman Van Rompuy, presidente de la Unión Europea, y a la británica Catherine Ashton alta representante de Política Exterior. Con esta elección, Europa acalla rumores y polémicas en torno a los altos cargos que se crearon con el Tratado de Lisboa, un intento para institucionalizar la anquilosada Unión. También deja claro que prefirió un perfil discreto y administrativo para esos puestos, pues ni Van Rompuy ni Ashton son estrellas políticas. Su gran fortaleza es ser conciliadores: Van Rompuy, por ejemplo, logró crear consensos en Bélgica en crisis y alejó el fantasma de la división. Más que nada, Europa logra un balance, pues Van Rompuy pertenece a un país pequeño pero muy comprometido con el proyecto continental, mientras Ashton viene de un país escéptico pero con gran peso en la agenda internacional. El gran perdedor fue Tony Blair, quien había sonado mucho para el cargo más importante del continente.