La deuda del Caribe

La isla comienza un duro proceso con sus acreedores de la Corporación para el Financiamiento Público en lo que podría ser la mayor bancarrota municipal de Estados Unidos. Con este impago, el ‘estado libre asociado’ obliga a los acreedores a reestructurar la deuda de 72.000 millones. Mientras tanto, Nueva York, Washington y Orlando han sido testigos en los últimos días de manifestaciones que piden al gobierno que ayude a Puerto Rico con su deuda. “El gobierno no visualiza un rescate, pero existe asistencia federal para que se cumplan las obligaciones financieras de Puerto Rico”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest. Pero el gobierno de Obama no puede asumir el pago tras ocho años de recesión económica. A la isla (incluida por la ONU en la lista de las colonias que quedan en el mundo)  solo le queda liquidez hasta noviembre, y está preparando un plan de reestructuración que presentará en septiembre para llegar  a un acuerdo con sus acreedores. Pero solo si el Congreso de Washington da el visto bueno.