Home

Mundo

Artículo

| Foto: AP

RESCATE

Mineros de Chile: listo el túnel, se acerca el rescate

El túnel de rescate ya está terminado, listo para que los 33 mineros atrapados en el derrumbe del socavón de San José inicien su camino de ascenso, tras 68 días sin ver el sol.

Alianza BBC
11 de octubre de 2010

En la madrugada del lunes, al menos cinco horas antes de lo que habían previsto originalmente las autoridades chilenas, los técnicos rescatistas concluyeron la tarea de "encamisado" para garantizar las condiciones de seguridad.

Así lo confirmó a BBC Mundo el gobierno del presidente Sebastián Piñera, a cargo de este "operativo San Lorenzo" que entra ahora en su tramo final.

Con la tarea de casing o revestimiento, los expertos buscaron evitar desprendimientos de roca, conteniéndola con tubos de acero soldados entre sí.

Durante el fin de semana, y tras evaluar el estado de las paredes, habían decidido reforzar sólo los primeros 90 metros del túnel, donde existían mayores riesgos de atascos o daños para las cápsulas Fénix. En estas cajas metálicas, especialmente diseñadas, los hombres recorrerán los casi 630 metros de ducto hacia la superficie.

El próximo paso será el armado de una torre-ascensor, sobre la que se izarán las cápsulas. Durante el día se enviará una cámara de video para revisar el estado de la roca en todo el trayecto.

Luego se introducirá una de las Fénix vacía para hacer pruebas, de cara al ascenso final: el primero de los mineros podría estar afuera el miércoles y el último, unas 48 horas después.

Listos para bajar

En tanto, los helicópteros de la Fuerza Aérea chilena que tomarán parte en el rescate –trasladando a los mineros hasta el hospital de la vecina ciudad de Copiapó- sobrevolaron durante la noche el cerro de San José.

El simulacro buscaba evaluar las condiciones de transporte, en caso de que los viajes deban hacerse de noche.

En tanto, los responsables del operativo seleccionaron ya al equipo de especialistas que bajará a la mina para asistir a los mineros en la salida.

Según los últimos cálculos, el izado demorará unos 20 minutos por obrero y, después de cada trayecto, la cápsula será revisada, por lo que se estima un ritmo de una hora por rescate.

La Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), que asesora en la labor, entregó 33 bolsos con prendas especialmente confeccionadas, cómodas para permitir movimiento y en tela impermeable y antitranspirante. Cada uno de ellos recibió su traje hecho a medida, con su nombre impreso sobre el pecho.

El "honor" de ser el último

Las autoridades de Salud señalaron que en las próximas horas se dará a conocer el orden de rescate, para lo que se seguirá una división en grupos según las capacidades.

Primero saldrán los más hábiles, con mejor capacidad de respuesta para maniobrar las cápsulas en sus primeros viajes, cuando pueden surgir imprevistos; luego los débiles, con dolencias físicas como diabetes o problemas respiratorios, y finalmente los fuertes, capaces de ser testigos del rescate de los compañeros sin caer presos de la ansiedad.

Pero, mientras en la superficie los periodistas se preguntaban cuál de los 33 mineros saldrá primero, a 700 metros bajo tierra la discusión era exactamente la contraria: quién tendrá el "honor" de salir el último.

Como una señal de los lazos de camaradería que se han tendido en estos dos meses, los 32 chilenos y el boliviano atrapados se disputan el turno… y la "pelea" fue por ceder el lugar a los compañeros.

"Les dije que necesitábamos acordar con ellos el orden de salida por razones técnicas, ¿y cuál fue la reacción de muchos de ellos?: 'sí, ministro, todo eso está muy bien pero yo quiero salir el último'. Y luego otro y otro: 'no, compadre, ya dije que el último era yo'", relató el titular de Salud, Jaime Mañalich.

Y agregó: "Mantienen un absolutamente admirable espíritu de solidaridad, de compañerismo… Es impresionante cómo ellos mismos se las han arreglado".

Día D: el miércoles

Pese a que los rescatistas ganaron unas cuantas horas en la labor de encamisado, por el momento la fecha de la operación final se mantiene: el miércoles será el "día D", según informó el ministro de Minería, Laurence Golborne.

El encamisado, que concluyó el lunes, fue la última intervención en la roca del túnel. Antes, la perforadora T-130 había logrado el cometido mayor: "romper" en el taller subterráneo, cercano al refugio minero, después de horadar por casi 630 metros.

Ocurrió a las 8 de la mañana del sábado, cuando el campamento Esperanza celebró con estruendo que la máquina del llamado Plan B había alcanzado a abrir una vía de contacto con los mineros con el ancho necesario para el rescate.

Por eso se ganó el apodo de "La Liebre", capaz de completar la tarea en 33 días, un plazo menor al que se había pronosticado.

En simultáneo, sigue avanzando la perforación alternativa del llamado Plan C, como respaldo ante posibles contratiempos. El Plan A, pensado originalmente como la opción más segura para alcanzar el refugio en menor tiempo, ya fue cancelado de manera definitiva.