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El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, asiste al segundo día de la cumbre del G20 que acoge la ciudad de San Petersburgo (Rusia) | Foto: EFE

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Obama, convencido de ataque en Siria

El mandatario estadounidense mantuvo sus diferencias con Putín. Hablará al pueblo el martes.

6 de septiembre de 2013

El presidente de EEUU, Barack Obama, dijo el viernes que sigue convencido de la necesidad de lanzar un ataque militar contra Siria por el uso de armas químicas, y señaló que el próximo martes 10 de septiembre dirigirá un mensaje a los estadounidenses acerca de esa crisis.

Obama subrayó que "debe haber una respuesta firme y debe haber medidas serias" para castigar al régimen de Bachar al Asad, pues las armas químicas son un peligro para toda la región, en una rueda de prensa al término de la cumbre del G20 en San Petersburgo.

"Seguimos pensando que el régimen de Al Asad ha usado esas armas, y es una tragedia. También es una amenaza para los países vecinos y para todo Oriente Medio porque pueden caer en manos de grupos insurgentes", afirmó Obama.

Reunión con Putin

El presidente de EE. UU. afirmó que ha tratado sobre el asunto este jueves y viernes con sus colegas del G20, y que continuará en los próximos días tratando de buscar apoyos para una intervención armada.

De hecho, el presidente ruso, Vladimir Putin se reunió con Obama (pese a que se había cancelado previamente un encuentro bilateral) para hablar del tema al margen de la cumbre de jefes de Estado del G20, pero no lograron ponerse de acuerdo, cada uno "mantuvo su posición", indicó el mandatario ruso.

"Nos reunimos con el presidente estadounidense" este viernes, declaró Putin en una conferencia final de la cumbre del G20 de San Petersburgo ampliamente dominada por las tensiones con respecto a Siria.

"Hablamos sentados, la conversación duró 20 a 30 minutos", precisó Putin.

"La conversación fue constructiva, significativa, cordial. Cada uno mantuvo su posición", agregó.

El presidente ruso mantiene un inflexible apoyo al régimen de Bashar al Asad y rechaza toda idea de una intervención militar contra Damasco, que Barack Obama quiere llevar a cabo en reacción al ataque con armas químicas del 21 de agosto por el que se acusa al régimen sirio.

Obama indicó que mantuvo discusiones "constructivas" con su homólogo ruso al respecto de la situación en Siria, pero que no se refirieron a la situación del ex consultor de la Agencia de Seguridad Nacional estadounidense (NSA), Edward Snowden.

"No esperaba que nos pusiéramos de acuerdo sobre el tema de las armas químicas", reconoció Barack Obama

ONU, paralizada

Aunque Obama reconoció que algunos de sus colegas quieren un aval del Consejo de Seguridad de la ONU, y dijo que respeta a quienes piensan que es inaceptable un ataque sin este beneplácito, agregó que dada la inacción del Consejo este principio no puede aplicarse en este caso.

"El Consejo de Seguridad de la ONU prácticamente está paralizado para una decisión sobre la cuestión siria", señaló Obama, en alusión a la postura de Rusia y China contraria a una intervención en Siria.

Aseguró que la mayoría de los países del G20 acusan a Damasco de haber usado armas químicas, aunque Rusia no está de acuerdo.

Una acción contra Damasco sería "una señal para todas las naciones de que no queremos vivir en un mundo así", señaló y dijo que se deben cumplir las normas internacionales.

Obama no quiso responder directamente a la pregunta de si ordenará un ataque en el caso de que el Congreso de EE. UU  no dé su visto bueno, y solo dijo confiar en que recibirá la luz verde.

Once países piden acciones

Una coalición de once países pidieron una "respuesta internacional fuerte" contra el régimen sirio al que acusan de haber llevado a cabo un ataque con armas químicas.

Los mandatarios de Australia, Canadá, Francia, Italia, Japón, Corea del Sur, Arabia Saudita, España, Turquía, Gran Bretaña y Estados Unidos firmaron el comunicado en el que condenan "de la manera más fuerte" los ataques del 21 de agosto en las afueras de Damasco.
 
En el texto piden "una fuerte respuesta internacional a esta grave violación de la legislación internacional", indicó un comunicado difundido por la Casa Blanca.