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El presidente de EE.UU. en su comparecencia del jueves ante ambas cámaras del Congreso, ante las que presentó su plan para reactivar el empleo y la economía de su país. | Foto: AP/Charles Dharapak

ECONOMÍA

Obama presenta un plan de empleo y señala que es hora de aprobar los TLC

El presidente estadounidense anunció que es la hora de aprobar los Tratados de Libre Comercio que EE.UU. tiene pendientes de aprobación con Colombia, Panamá y Corea del Sur, aunque con condiciones.

8 de septiembre de 2011

El presidente de EE.UU., Barack Obama, presentó el jueves un plan de empleo por valor de 447.000 millones de dólares en un discurso ante ambas Cámaras del Congreso, en donde también anunció que el próximo 19 planteará una propuesta "más ambiciosa" para el recorte del déficit y la deuda pública.

En su discurso, Obama también lanzó un nuevo llamamiento para la aprobación en el Congreso de los tratados de libre comercio pendientes de ratificación con Colombia, Panamá y Corea del Sur.

"Es el momento de abrir el camino para una serie de acuerdos comerciales que harán más fácil para las empresas estadounidenses vender sus productos en Panamá, Colombia y Corea del Sur, al tiempo que ayudamos a los trabajadores cuyos empleos se han visto afectados por la competición global", señaló.

El "Proyecto de Ley para los Empleos Estadounidenses" requiere para su puesta en práctica la aprobación del Congreso, donde los demócratas controlan el Senado y los republicanos dominan la Cámara de Representantes, lo que puede dar lugar a una pugna partidista similar a la protagonizada este verano en torno al aumento del techo de la deuda.

En su discurso, Obama instó a los legisladores una y otra vez a "aprobar de inmediato" su plan, que "proporcionará un impulso a la economía que se ha estancado" y estará "completamente pagado".

Según el presidente estadounidense, "todo lo que está aquí es el tipo de propuesta que han apoyado tanto republicanos como demócratas".

Entre otras cosas, subrayó, la medida aportará recortes de impuestos para empresas que contraten a nuevos trabajadores y recortará impuestos sobre el salario de los trabajadores y las pequeñas empresas.

"Dará un impulso a la economía que se ha estancado y dará confianza a las empresas de que, si invierten y contratan, habrá clientes para sus productos y servicios", señaló.

En una alusión a las demandas republicanas de que se responda a la crisis económica con una disminución del gasto público para recortar el déficit fiscal, Obama aseguró que "todo en el proyecto de ley estará completamente pagado. Todo".

Para sufragar el programa, el presidente propone que la "super comisión" creada a raíz del acuerdo sobre el techo de la deuda, que debe identificar antes de diciembre recortes en el gasto público por valor de 1,5 billones de dólares en la próxima década, agregue a ese total el coste del programa.

Además, el próximo día 19 presentará un nuevo plan "más ambicioso" de recorte del déficit presupuestario, "un plan que no sólo cubrirá el coste de este proyecto de ley, sino que estabilizará nuestra deuda a largo plazo".

Según subrayó Obama, sus propuestas "reducirían el déficit mediante recortes del gasto adicionales; mediante ajustes modestos a los programas de salud, y mediante una reforma de nuestro Código Fiscal de modo que haga que los estadounidenses más acomodados y a las empresas de mayor tamaño que paguen su parte".

El aumento de los impuestos a los ciudadanos más ricos es una reclamación constante del presidente para hacer frente al déficit fiscal, aunque hasta ahora la resistencia a rajatabla de los republicanos lo ha hecho imposible.

"La gente de este país trabaja duro para cumplir sus responsabilidades. La pregunta esta noche es si nosotros cumpliremos las nuestras; si, a la vista de una crisis nacional, podemos detener el circo político y hacer de verdad algo para ayudar a la economía", afirmó el presidente.

Al concluir subrayó: "somos más duros que los tiempos que nos ha tocado vivir, y más nobles que la política que hemos vivido. Así que aprovechemos este momento".
 
Inicia trabajos el comité para el déficit 

El llamado supercomité especial del Congreso sobre la reducción de la deuda inició el jueves sus labores, con el imperativo de reducir drásticamente el déficit e impulsar la lenta economía, y advirtió que una crisis financiera amenaza a generaciones futuras de estadounidenses.

En una serie de discursos, los seis republicanos y seis demócratas que integran el panel expresaron la importancia de alcanzar una solución conjunta, dejando a un lado la encarnizada retórica de la reyerta partidista que reinó en meses anteriores sobre el incremento al límite de endeudamiento federal.

Esa pelea terminó con un acuerdo fuertemente reñido entre el presidente Barack Obama y los legisladores que crearon el Comité Selecto Conjunto sobre Reducción del Déficit, conocido como "supercomité".

"Me aproximo a nuestra tarea con un profundo sentido de urgencia, grandes esperanzas y expectativas realistas", dijo el legislador Jeb Hensarling, un copresidente del panel. "Nuestra tarea de lograr una reducción bipartidista del déficit por 1,5 billones de dólares no será fácil, pero es esencial", enfatizó.

Miembros del comité insistieron en que todos los elementos del presupuesto federal serán parte de cualquier producto final. Los demócratas quieren una mezcla de recortes de gasto y aumento de ingresos, mientras que los republicanos dicen que programas de beneficios, como Seguridad Social y Medicare deben estar en cualquier plan de recorte del déficit.

"Un producto final exitoso de este comité no será uno que haya escrito cualquiera de nosotros por cuenta propia: tendrá que incluir compromisos de todas las partes", dijo la senadora demócrata Patty Murray, otra copresidenta. Señaló que los miembros del comité han evitado marcar una línea que diga hasta donde llegar o identificado partes del presupuesto que no deben ser tocadas.

El panel fue encargado de encontrar, a más tardar el 23 de noviembre, un recorte de 1,5 billones de dólares en el transcurso de la siguiente década.
 
AP y EFE