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Vuelo de Malaysia Airlines lo derribó un misil del Ejército ruso, asegura informe

El equipo internacional que investiga la tragedia del vuelo MH17 de Malaysia Airlines, ocurrida hace cuatro años en Ucrania, reveló por primera vez este jueves que el misil utilizado para derribar el avión fue transportado por una brigada militar rusa.

24 de mayo de 2018

El Equipo de Investigación conjunta "ha llegado a la conclusión de que el BUK-TELAR que derribó el vuelo MH17 provino de la 53ª Brigada de Misiles Antiaéreos establecida en Kursk, Rusia", dijo el investigador holandés Wilbert Paulissen.

"La 53ª Brigada forma parte de las fuerzas armadas de Rusia", agregó en una rueda de prensa en Holanda.

El avión, operado por la compañía Malaysian Airlines, fue derribado cuando volaba en el este del espacio aéreo ucraniano el 17 de julio de 2014, sobre la región donde se enfrentaban las tropas leales a Kiev y los separatistas ucranianos.

El aparato había despegado de Amsterdam y se dirigía a Kuala Kumpur. Los 298 pasajeros y miembros de la tripulación, holandeses, australianos, británicos, malayos o indonesios, murieron.

Los investigadores ya habían concluido que el aparato fue derribado por un misil BUK de fabricación rusa disparado desde territorio ucraniano controlado por los separatistas prorrusos. Pero no habían precisado quién lo había disparado.

Los investigadores recrearon ahora el camino por el que fue transportado el misil desde Kursk, a unos 100 km de la frontera con Ucrania, utilizando videos y fotos.

Paulissen añadió que los investigadores "verificaron que el BUK-TELAR tiene cierta cantidad de características únicas. Esas características sirven como huella de identificación del misil".

Moscú negó insistentemente cualquier responsabilidad en el derribo del Boeing 777, asegurando que ningún proyectil de esas características había cruzado su frontera. "Ningún misil antiaéreo del ejército ruso cruzó jamás la frontera ruso-ucraniana", dijo el ministerio de Defensa ruso en un comunicado citado por agencias de prensa, en el que culpó a "unidades ucranianas" de haber derribado el avión con "misiles Buk". 

La investigación de los holandeses se focaliza en unas 100 personas sospechosas de haber tenido un "papel activo" en el incidente, pero los investigadores no nombraron de momento a sospechosos.

El jefe del equipo, Fred Westerbeke, dijo el jueves que la investigación está en su "última etapa" pero añadió que "aún hay trabajo".