PAKISTÁN
¿Vuelta a las catacumbas?
La comunidad cristiana en Pakistán llora la muerte de ocho fieles en la ciudad de Gojra. Ante un rumor según el cual habrían profanado un ejemplar del Corán, extremistas islámicos quemaron decenas de viviendas de cristianos, con el saldo mencionado. Irrespetar el libro sagrado es castigado con la pena de muerte, pero, según voceros del gobierno, no hay pruebas de que se haya presentado el hecho. Desde cuando Pakistán se declaró aliado de Estados Unidos en "la guerra contra el terror", los cristianos han sido víctimas de ataques similares. Este tipo de ataques acentúa las fisuras en una sociedad profundamente fracturada; esa minoría, que apenas es el 2 por ciento de la población, está poniendo mártires que recuerdan los primeros años del cristianismo.