Anarquistas en red

11 de agosto de 2003

En pleno centro de Berlín, a las 6 en punto de la tarde del viernes primero de agosto, unos 40 desconocidos sacaron sus celulares y empezaron a gritar como si estuvieran contestando sus teléfonos. El escándalo atrajo a cientos de personas que a esa hora paseaban por la ciudad o salían del trabajo y que no se explicaban qué podía estar pasando. Los excéntricos personajes aplaudieron por unos minutos y luego desaparecieron. Este es sólo uno de los últimos ejemplos de una tendencia que empieza a extenderse por Europa y Estados Unidos y que sus seguidores llaman flashmob (desorden repentino). Lo increíble es que los participantes de estos flashmob nunca se conocen entre sí. Por e-mail o por celular se enteran del lugar y la hora del 'desorden' con sólo unos minutos de anterioridad y siempre evitan a la prensa. Para Howard Rheingold, su creador, por ahora se trata de personas que quieren hacer algo aparentemente inocente y sin propósito, pero no debería sorprender que pronto se convierta en una forma de activismo político.