¿Criminal y mentiroso?

17 de marzo de 2007

La justicia estadounidense y la opinión pública internacional se afrontan el reto de creer o no en las confesiones del terrorista Khalid Sheik Mohammed.

Las declaraciones del paquistaní Khalid Shaikh Mohammed en una audiencia de trámite en Guantánamo, donde está prisionero, causaron sensación en Estados Unidos. “Fui responsable de la operación 9/11 de la A a la Z”, afirmó el paquistaní, quien dijo no sólo haber tomado parte en un sinnúmero de actos terroristas, sino haber planeado muchos otros que nunca se realizaron.

Algunas de las afirmaciones están respaldadas por otras evidencias, como el asesinato del periodista de Wall Street Journal Daniel Pearl. Incluso Mohammed sostuvo que decapitó “al judío norteamericano con mi sagrada mano derecha”, y pidió que, si había dudas, revisaran el video en el que aparece sosteniendo la cabeza de su víctima.
Pero otros asuntos, como su participación en las bombas de Bali y en el intento de Rochard Reid de volar un avión con explosivos en sus zapatos, produjeron escepticismo en los investigadores, lo mismo que los planes para un supuesto ataque en Corea del Sur, y un atentado contra el ex presidente Jimmy Carter. Según el analista jack Clonan, ex agente del FBI, Mohammed tiene un ego enorme y podría estar interesado en atribuirse los hechos para evitarse torturas, o para pasar a la historia. Un indicio en contra suya es que en ninguna de sus declaraciones incrimina a alguno de sus cómplices.