Echeverría al banquillo

8 de julio de 2002

Mientras en Chile los defensores de los derechos humanos están de capa caída luego de que el sistema judicial de ese país declarara al ex dictador Augusto Pinochet "demente irrecuperable", en México están de plácemes pues por primera vez en su historia un presidente comparecerá ante las autoridades por las posibles violaciones cometidas bajo su responsabilidad. En efecto, mientras Pinochet en el sur del continente se puede dar por impune, en México las matanzas de Tlatelolco, en 1968, y otra sucedida en 1971, podrían por fin ser objeto de justicia. El ex mandatario Luis Echeverría compareció para responder por sus actuaciones como ministro del Interior, primero, y como presidente después.