Estados unidos

26 de enero de 2008

Sentencia menor

Una jueza de Miami dictó un veredicto incómodo para la lucha de la Casa Blanca contra el terrorismo. El neoyorquino de origen puertorriqueño José Padilla fue condenado a 17 años y cuatro meses de cárcel, luego de que la Fiscalía pidió cadena perpetua por su vinculación a una célula de Al Qaeda que planeaba cometer atentados terroristas en Estados Unidos. A Padilla, un pandillero convertido al Islam, lo arrestaron en el aeropuerto de Chicago en 2002, cuando regresaba de Egipto. En ese momento las autoridades lo implicaron en un plan para detonar una bomba radiactiva; el gobierno lo declaró "combatiente enemigo" y le negó el juicio durante más de tres años. La sentencia, considerada una derrota para la Fiscalía, se debe a que no se le encontró culpable de haber matado a nadie a pesar de su vinculación con la red terrorista islámica.