La historia interminable

LA QUEMA DE VArios McDonalds y de otros símbolos de la economía norteamericana, como el de la Coca-Cola, realizada la semana pasada por un grupo de agricultores franceses, es apenas una manifestación del que será, sin duda, uno de los conflictos más sonoros de final de siglo: la "guerra" comercial. Enfurecidos con el anuncio de un acuerdo entre los Estados Unidos y la Comunidad Europea para imponer restricciones a la producción agricola o que convierte a Francia en el mayor perdedor, por tratarse de la primera potencia de la Comunidad en ese campo y el segundo exportador mundial de alimentos los agricultores lograron que su Gobierno se pronunciara, con el respaldo del Parlamento, en favor de un veto en contra de la determinación. Y a pesar de que la semana pasada se reunió de nuevo la Ronda Uruguay del GATT, las expectativas de un pronto acuerdo comercial se diluyeron. Sobre todo porque la actitud de los franceses no deja de ganar adeptos entre los agricultores de la comunidad. Lo que quiere decir que el conflicto puede durar todavía muchos años más.