LA PIZZA NO ES UN JUEGO

19 de diciembre de 1994

COMO UN VERDADEro sacrilegio consideran algunos napolitanos la llegada a su ciudad de la cadena de restaurantes 'Pizza Hut', filial de la multinacional de bebidas Pepsico. Los fundamentalistas de ese plato -que el presidente Bill Clinton saboreó en su visita de este año- sostienen que Nápoles es la cuna universal de la pizza, donde nació en 1700, cuando cocineros del lugar idearon un plato a base de harina de trigo, tomate, ajo y aceite de oliva, y que tomó el nombre de 'pizza a la pescadora' porque era el preferido de los pescadores de la bahía de Nápoles. En 1889, en honor de Margarita de Saboya, apareció la 'pizza Margarita', con el queso mozzarella en lugar del ajo. El vicepresidente de la Asociación Europea de Productores de Pizza (Apes), Antonio Pace, dice que ese plato "es la imagen misma de Nápoles y no se puede permitir el uso de ingredientes absurdos, o de elaboración fantasiosa". El problema es más que gastronómico, pues el mercado italiano de pizza vale 14.000 millones de dólares.-