Presidente paseador

6 de julio de 1992

NO SE SABE QUIEN estaba más sorprendido. Si el transeúnte que se encontró de manos a boca con el presidente de Venezuela por una calle céntrica de Caracas, los miembros de su escolta que trataban afanosamente de interponerse entre la gente y su jefe, o los periodistas que atendían una rueda de prensa que terminó en paseo peatonal. La semana pasada el primer mandatario venezolano resolvió de improviso caminar los dos kilómetros que separan al Palacio de Miraflores de la Plaza de Bolívar, al contestar a un correponsal que le preguntó si era cierto que se había contratado a un grupo de extranjeros para protegerlo. "Le invito ahora a ir a la Plaza para que vea que camino solo, con la seguridad habitual de cualquier presidente latinoamericano", le dijo Pérez. El "Gocho" encontró a su paso gentes que le pidieron que renunciara, pero no fueron pocos los gritos de apoyo. A pesar de la espectacularidad del gesto, el martes se produjo una nueva manifestación estudiantil que causó otro muerto y nuevas dudas sobre su capacidad para permanecer en el cargo.-