SALVADA DEL CONCORDATO

LA COMPAÑIA PROductora de seda Coseda S.A. estuvo a punto de irse a concordato. La empresa, cuya planta costó seis millones de dólares. comenzó a operar el año pasado en Popayán. Pero la productividad del gusano fue interior a la estimada y sólo pudo operar al 20.5 por ciento de su capacidad. Esto generó una iliquidez tal que en la asamblea de marzo se acordó que cada accionista capitalizara la compañía en 1.100.000 dólares. El capital inicial era coreano (50 por ciento), del IFI (20 por ciento). la Federación de Cafeteros (20 por ciento) y el grupo de Inversiones Sanford, encabezado por Edmundo Esquenazi y Jimmy Mayer (10 por ciento). Posteriormente, la Federación y el IFI le vendieron a Sanford. Tomada la decisión, el inversionista coreano dijo que no le dejaban sacar la plata de su país. lo que llevó a votar el concordato. Pero a última hora se llegó a un acuerdo con los acreedores los bancos Ganadero y Popular, y las corporaciones financieras Colombiana, Nacional. Suramericana, Progreso e Inversora para refinanciar la deuda de 4.300 millones de pesos a cinco años, con dos años muertos y capitalización de los intereses causados hasta la fecha del acuerdo.